Continúan los problemas para Marc Márquez y Honda, sumado a un gran premio de Sachsenring para olvidar. Desastroso en lo personal para el piloto de Cervera que llegó a caer hasta cinco veces durante el fin de semana.
A todo esto aparece en escena Taka Nakagami, compañero de Marc y único piloto Honda que salió a la pista en este gran premio, habló con los medios de comunicación después de la carrera. El japonés finalizó en la decimocuarta posición y dijo que “esta Honda no se puede pilotar, es muy difícil de manejar en la mayoría de las curvas”.
“El momento en el que entras, esta moto no genera adherencia, por lo que es fácil tener un high side y cuando das gas no hay grip y la moto siempre está resbalando. No sé si es una cuestión mecánica o electrónica, pero es difícil de gestionar. Está claro que lo vamos a seguir intentando, pero tras la fuerte caída de Marc es el momento más difícil para él y para nosotros.” dijo con contundencia Nakagami.
Ambos pilotos usan diferentes chasis: el japonés lleva el original de Honda mientras que el catalán usa un chasis fabricado expresamente por Kalex, para tratar de resolver problemas. Lo que está claro, es que ninguno de los dos funciona y genera las mismas sensaciones de inseguridad.
“Lo más difícil es la carrera del domingo. De alguna manera alguna vuelta puedes completar, pero por la distancia de carrera no es segura. Debemos terminar las carreras aunque en el momento que intentas superar el límite te ves en la grava”, expresó el japonés.
Escuchando las declaraciones de los dos pilotos principales de la escudería japonesa, parece utópico pensar que se pueda encontrar una solución a corto plazo.
Lucio Cecchinello, ex piloto, fiel patrón de la escudería japonesa y fundador del equipo Honda LCR, manifestó que a la moto le faltan pequeñas cosas en muchas situaciones. “No se trata de un gran problema, sino que es hay varios problemas en la aerodinámica, en el motor, en la electrónica o en la distribución de peso. Es un poco de cada aspecto”.
“Marc hizo bien en no salir a correr, si hubiera estado al 100%, estoy seguro que hubiera salido a correr. Es una cuestión de realidad”, expresó Lucio.
La última vez que Marc ganó un campeonato fue en 2019, con una moto complicada que obligó a Jorge Lorenzo, compañero entonces, a retirarse por falta de entendimiento con la moto. El talento de Márquez seguramente ha ido ocultando las carencias y problemas de la moto. Entre la pandemia de por medio y el auge de las Ducati y Aprilia, las Honda han quedado en fuera de juego.
Además hay un problema de comunicación entre Japón y Europa a la hora de trabajar con la escudería de por medio, por lo que es evidente que una respuesta y mejora a corto plazo es imposible. Especialmente, por el tiempo que requiere construir una moto desde cero.