Los Raptors de Toronto llegaron por primera vez al Staples Center como campeones de la NBA y reivindicaron su título con una victoria sorpresa, pero merecida, ante Los Angeles Lakers de las súper estrellas, que vieron cortada su racha triunfal.
Los Raptors se enfrentaron a los nuevos Lakers y mostraron su condición de campeones al conseguir la victoria por 104-113, tras dominar todas las facetas del juego, pese a otra actuación deslumbrante de LeBron James, que logró un nuevo triple doble, el 85 de su carrera.
Sus jóvenes valores, encabezados por el ala-pívot camerunés Pascal Siakam y el base Fred VanVleet, fueron los líderes que permitieron a los Raptors cortar la racha triunfal de los Lakers del pívot Anthony Davis y el alero estrella LeBron James.
Siakam logró un doble-doble de 24 puntos y 11 rebotes como líder de los Raptors (7-2), que ganaron el tercer partido consecutivo, el sexto de siete, y ocupan el segundo lugar en la División Atlántico, solo superados por los Celtics de Boston (7-1) que tienen la mejor marca de la liga.
VanVleet confirmó su condición de jugador importante en los campeones y también acabó con un doble-doble de 23 puntos y 10 asistencias. El español Marc Gasol, mientras, aportó dos puntos y siete rebotes.
El triunfo de los actuales campeones de la NBA tuvo doble valor al jugar sin dos hombres clave tras perder al titular, el base Kyle Lowry por una fractura en el pulgar izquierdo, y al ala-pívot español de origen congoleño Serge Ibaka por una torcedura en el tobillo derecho.
Davis anotó 27 puntos y acabó como líder del ataque de los Lakers, pero que no fueron suficientes a la hora de evitar la derrota, la primera que sufren en su campo del Staples Center en los cinco partidos que llevan disputados.
James tampoco pudo ser factor ganador a pesar que aportó un triple-doble de 13 puntos, 15 asistencias y 13 rebotes.
Sin embargo, los Lakers sufrieron su primera derrota desde el primer encuentro de la temporada, cuando cayeron ante los Clippers, al comprobar que tras sus dos grandes estrellas no hubo ningún otro jugador que pudiesen ayudarlos en la labor de equipo.