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Los Raptors y Juancho dan otra lección de cómo tumbar a Doncic y los Mavericks

Los Raptors y Juancho dan otra lección de cómo tumbar a Doncic y los Mavericks

Luka Doncic lleva unos días que se siente solo, apartaron de sus compañeros. Después del severo correctivo encajado en Boston (125-112), los Toronto Raptors, con Juancho Hernangómez entre sus fundamentales colaboradores -otra vez titular con 10 puntos y 5 rebotes-, también aislaron al esloveno, superado por los constantes y agobiantes 2×1 de los Toronto Raptors para sufrir uno de sus peores partidos de la temporada, 24 puntos (8/15 en tiros de campo), 9 asistencias y 7 rebotes. Y cuando el base se queda por debajo de los 30 tantos, Dallas pierde. Es matemático. En la guarida de los ‘Raps’, donde sólo han ganado Sixers y Nets en lo que va de temporada, los Mavericks se perdidos con el esloveno eclipsado (105-100).

Toronto impartió un clínic de cómo frustrar al esloveno y Dallas, con su técnico, Nick Nurse como instigador desde el banquillo y O.G. Anunoby como el más significante y visible ejecutor en el parqué, un pesado que no se pudo quitar de encima en todo el partido el esloveno, que se tomó el ‘castigo’ del alero con deportividad, como un caballero, ayudándole a levantarse después de que le estampara un tapón. Pocos tipos más pesados que el autoproclamado ‘Mejor Defensor de la NBA’, uno de esos que interrumpe constantemente con su defensa, que no se calla ni debajo del agua en ataque, por todos los lados, 26 puntos (9/19 en tiros), 9 rebotes, 2 asistencias, 2 robos y 2 tapones.

Con apenas cuatro días de diferencia, Celtics y Raptors han puesto en escena dos planes distintos pero con la misma eficacia para dejar solo a Doncic. Si Boston, que renunció a los 2×1 para impedir a Luka que encontrara al compañero libre y aceptó los cambios en los bloqueos, le invitó al esloveno que resolviera el partido él solo, sin ayuda -alcanzó los 42 puntos-, Toronto todo lo contrario, proponiendo al base que delegara con incesantes 2×1 -y hasta 3×1-, en muchos de ellos involucrado Juancho como segunda ayuda

Sirva el uso de balón -porcentaje de jugadas del equipo finalizadas por el jugador en cuestión-, para ilustrar la diferencia entre los planteamientos de Celtics y Raptors, con un un USG del 42% el ex del Real Madrid en el TD Garden, el más alto de la temporada, y un 25% en el Scotiabank Arena, el más bajo. Y a decir verdad, los compañeros de Luka se lo tomaron con entusiasmo y acierto en los primeros minutos, con un demoledor 4-15 en los primeros 6 minutos sin ningún punto de Doncic. 

Pero Toronto insistió y los Dinwiddie, Finney Smith y compañía acabaron sucumbiendo a la presión, acabando el conjunto de Texas con un exiguo 28% en triples pese a ser casi todos liberados. Y los Raptors, con su plan hasta el final, no abandonaron la fidelidad a sus ideas bajo ninguna circunstancia, recurriendo también al 2×1 contra el ’77’ en la última posesión de Dallas, con 103-100. Dorian Finney-Smith recibió en la esquina con margen pero erró el pase. Un final de partido con Juancho en el quinteto, aumentando Nick Nurse su confianza en él día tras día.

Si Doncic no lo puede hacer todo solo, a sus compañeros tampoco se les puede dejar solos, insuficientes las dobles figuras en anotación del propio Finney Smith (16), Spencer Dinwiddie (15), Maxi Kleber (11) y Christian Wood (10). Queda otra vez patente que Dallas tiene un problema de equipo, aunque no está preocupado sin embargo Jason Kidd, que no lo ve así pese a que en el fondo quiere el anillo. “¿Si estamos preparados para luchar por el título? Estamos todavía en noviembre, es algo que podré responder en marzo. Pero estoy contento con lo visto hasta ahora”, dijo el técnico de Dallas. “Para mí no es difícil jugar con 2×1, tenemos que aprovechar que la pista se hace más grande y ser más agresivos de cara al aro”, señalaba, por su parte, Luka Doncic.

“¿Jugar recibiendo 2×1? Para mí no es difícil”


Luka Doncic 

Kidd, esta vez, se vio desbordado en la pizarra de Nick Nurse. El entrenador de los Raptors tiene mucho de científico, entrenador ‘molón’ en las comparecencias previas a los partidos con su sudadera y su gorra, aspecto de escrupuloso investigador en los partidos con su pelo con raya al lado y sus gafas. “¿La defensa a Doncic? Tenemos varias alternativas sobre la mesa. Y durante el partido iremos ajustando”, explicaba antes del encuentro.

La encanta a Nurse experimentar y se atrevió a hacerlo de nuevo con Luka, presentando diferentes alternativas defensivas. Asignándole como defensor a Anunoby, fuerte en el poste, se aseguraba de entrada que Doncic no hiciera la de llevarse el ‘pequeño’ a postear, una de sus preferidas fuentes de puntos ya que, si no supera a su defensor en el duelo individual, atrae un 2×1 sobre él y encuentra al compañero liberado sacando el balón al perímetro. Los Raptors tampoco permitieron que se pusiera Luka a ‘jugar’ con los cambios en los bloqueos y siempre o casi siempre saltaban al 2×1 en la defensa del ‘pick and roll’.

Otras veces, sin que hubiera bloqueos Anunoby, que se lo sabía todo sobre su ‘objetivo’ -es un obsesivo del vídeo-, orientaba el bote del esloveno a la izquierda y luego llegaba la ayuda para ‘acorralarle’. Otras, a Doncic le caía un 2×1 a media pista para que soltara lo antes posible el balón. El esloveno se lo tomaba con calma, sin recibir técnica esta vez.

Juancho, adornando sus 10 puntos y 5 rebotes con un 4/6 en tiros y un 2/4 en triples, hacía lo suyo también para contenerle más allá de su defensa, de amistosa cháchara con Luka en los tiros libres. Sabe que, aun como enemigo, es mejor estar de buenas con él. Mejor no ‘provocarle’. “Cuando jugamos a videojuegos es el mismo. Es realmente competitivo, si una cosa no puedes intentar hacer con él es reírte de él”, contaba en la previa del partido a Doug Smith en ‘Toronto Star’.

Fred VanVleet, gran noticia su regreso mientras se aproxima la vuelta de Pascal Siakam -prevista para el miércoles-, asumió todas las responsabilidades junto a Anunoby, 26 puntos pese a no ser su mejor noche en el tiro (7/18), 7 asistencias y 5 rebotes para ganarse también el mejor más-menos con un +12. Dallas se vio impotente al final para frenarle y nunca encontró la alternativa defensiva ideal sobre el base, que hizo sangre sobre todo con la defensa hundida de McGee en el bloqueo directo. Los ‘Mavs’, en un gran esfuerzo colectivo aunque insuficiente al final, levantaron una diferencia de 8 en el último parcial (81-73) pero imperó el innegociable plan de los Raptors para sumir a Doncic en la soledad. Dallas tiene trabajo por delante.




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