El perfil del entrenador NBA nunca había sido demasiado variado. Solo en los últimos años nos hemos empezado a acostumbrar a que técnicos afroamericanos tomen el mando de los banquillos de la liga, aunque estos han llegado para quedarse.
Con Ime Udoka en las finales, entrenador de origen nigeriano, encontramos el ejemplo perfecto. Un equipo que hace 10 meses estaba dirigido por Brad Stevens y que Udoka ha llevado a la eliminatoria por el título.
Hace casi 60 años, Bill Russell fue el primero en romper esta barrera. Aceptó el puesto de entrenador-jugador en los Celtics de la temporada 1966-1967 y logró el anillo de campeón al año siguiente. A Russell le seguirían otros como Al Attles o Lenny Wilkens, que abrirían el camino para el resto.
En una NBA mayormente afroamericana en cuanto a los jugadores, los banquillos no han seguido jamás ese perfil. De los alrededor de 260 técnicos que ha habido en la liga desde Bill Russell, apenas 1 de cada 3 ha sido de color.
Por si fuera poco, la mayoría de estos han durado menos en su puesto que sus compañeros blancos. Sin embargo, esta tendencia ha cambiado por completo en los últimos años.
“Durante años no hubo oportunidades para jóvenes entrenadores como Udoka, Silas, Ham o Unseld Jr.“, dijo Rick Carlisle recientemente. El entrenador de los Pacers es también el presidente de la Asociación de Entrenadores y ha peleado en el último lustro por ellos.
Todo esto también tiene su origen en una reunión que tuvo lugar en 2019. Ahí nació la iniciativa por la igualdad de los entrenadores de la liga (NBACEI) tras juntarse con directivos de la NBA y buscar soluciones para ellos en términos de diversidad y oportunidades.
A día de hoy un 50% de los técnicos que encabezan los banquillos NBA son afroamericanos, algo impensable hace apenas unos años. Ha habido ocho contrataciones de color en los últimos 12 meses. Como dice Adam Silver el objetivo es lograr que esto no sea noticia y que “cuando alguien sea contratado, la primera reacción no sea su color de piel“.
Otro entrenador negro va a ponerse este año al frente de una franquicia. Será Mike Brown, que ha firmado con Sacramento de cara a la temporada que viene. “Quiero que mi hijo encienda la tele y vea gente como él liderando a un equipo NBA en la banda. Puede ser muy inspirador“, contó.
La lista es más larga que nunca. A Udoka y Brown se suman en el último año Ham (Lakers), Silas (Rockets), Billups (Blazers), Kidd (Mavericks), Mosley (Magic), Unseld Jr. (Wizards) y Green (Pelicans). Otros ya llevan más años, como Casey (Pistons), Williams (Suns), Bickerstaff (Cavaliers), Rivers (Sixers), Lue (Clippers) o McMillan (Hawks).