Romelu Lukaku no estará todavía listo para jugar este sábado (18 horas) con el Inter ante la Roma, en contra de las previsiones que se habían hecho recientemente. El goleador belga, de baja por lesión muscular en su muslo izquierdo desde hace un mes, realizó un trabajo diferenciado en Appiano este miércoles y por ello se da como prácticamente imposible que pueda volver a jugar este fin de semana, a apenas tres días de que el Inter reciba al FC Barcelona en el Estadio Giuseppe Meazza, en un partido trascendental para las posibilidades de ambos equipos de clasificarse para los octavos de final de la gran competición europea.
La Gazzetta dello Sport cifró en un elocuente 5% las posibilidades de que el internacional belga, cedido por el Chelsea, pueda tener los minutos de rodaje necesarios ante la Roma de José Mourinho antes de recibir al Barça. Séptimo en la Serie A, el equipo de Simone Inzaghi confiaba en el concurso de Lukaku para formar su delantera más poderosa junto al argentino Lautaro Martínez, aunque ese anhelo, por lo que apuntan en Italia, deberá aguardar unos días para concretarse. Está claro, en cualquier caso, que Lukaku, si es que llega, lo hará muy corto de preparación para medirse el próximo martes 4 de octubre ( 21 horas) al Barça, con el que el Inter está empatado a tres puntos em el Grupo C, ambos tres por debajo del líder, el Bayern de Munich. El objetivo del Inter es que Lukaku pueda estar para el partido de Champions League ante el Barça, aunque hay máxima cautela porque quieren minimizar cualquier riesgo de recaída en un futbolista con una musculatura tan poco común, con 100 kilos de peso y un estilo de juego de arrancadas continuas.
Además de Lukaku, el contestado Inzaghi no podrá alinear ante la Roma al centrocampista croata Marcelo Brozovic, que ha caído en sus adductores en un partido de su selección.
Al menos, Inzaghi sí recuperará frente a la Roma al centrocampita turco Hakan Calhanoglu.