Romelu Lukaku parece haber recuperado su mejor forma desde hace unas semanas. El delantero belga está dispuesto a demostrar que es importante en el Inter de Milán y manda un mensaje con dos claros destinatarios: el entrenador, Simone Inzaghi, y el propio club. A ambos les exige más tiempo de juego y más confianza, porque se siente importante para el equipo.
‘La Gazzetta dello Sport’ asegura que lo que quiere Lukaku es forzar al Inter a negociar con un Chelsea que le tiene cedido y al que no quiere volver. Tampoco a la Premier League. Lo que quiere es convencer donde está y donde quiere seguir. “Ya veréis como al final me quedo”, habría dicho el futbolista a los directivos, convencido de que les va a disipar las dudas, si es que las tienen.
Si el belga no ha estado bien hasta ahora -dice la prensa italiana- es porque los entrenamientos no son los adecuados para él, para su físico, y también porque cree que necesita mayor continuidad, jugarlo todo, no ser sustituido. Él por su parte, está dispuesto y convencido de que va a devolver la confianza. Y lo está haciendo. Por delante un mes decisivo por su futuro.