El banquillo de los Lakers arde. Ante la falta de talento y alternativas que hay en la plantilla más allá de LeBron y Davis, una feroz actitud es indispensable para competir. Lo entienden todos y sobre todo Patrick Beverley, que no dudó en recriminar precisamente a uno de los dos astros, Davis, una supuesta falta de actitud del pívot en un tiempo muerto:
“Tus manos levantadas son un tapón para cualquier otro en la NBA. Así que úsalas. ¿Sabes lo que te digo?”, le dejó ir Beverley, que acompañó el aviso con una onomatopeya para enfatizarlo. El base, especialmente implicado como se vio en una acción en la que se fue al suelo para recuperar el balón, quería que todos se aplicaran con la misma agresividad. El base andaba revolucionado, ya que, según varios medios estadounidenses, se dirigió a la afición de los Lakers gritándoles que “vamos a ir a play-offs”.
Pero el banquillo de los Lakers también dejó otra más que curiosa imagen en un tiempo muerto. Darvin Ham, harto de que sus jugadores acumularan faltas, les escribió la consigna grande y clara en la pizarra: puntear sin cometer falta.