En un Europeo en el que la mayoría de ojos están puestos en las ‘superestrellas’ de la NBA Luka Doncic, Giannis Antetokounmpo y Nikola Jokic, este último eliminado en los octavos de final, el habilidoso pívot finlandés de los Utah Jazz Lauri Markkanen se ha erigido como el cuarto elemento diferencial del campeonato.
Tras su memorable actuación (43 puntos) en los octavos de final contra Croacia (94-86), el completo jugador interior nacido en Vantaa hace 25 años se medirá a España en los cuartos de final en un momento dulce.
Lauri proviene de una saga de deportistas. Su padre, Pekka, fue un jugador profesional de baloncesto que pasó por el CB Sant Josep de Badalona en la temporada 1993-94, mientras que su hermano Eero se dedicó al fútbol y llegó a jugar como delantero en el Real Madrid Castilla bajo las órdenes de Zinedine Zidane en la temporada 2014-15.
La estrella finlandesa es una de las sensaciones del Eurobasket. En los seis primeros partidos del campeonato ha sido el líder de la vistosa selección nórdica. Ha promediado 27,8 puntos, con un notable porcentaje de acierto en tiros de campo (53,4%), y ha capturado más de 7 rebotes.
Su equipo solo ha perdido en el debut contra Israel (89-87) y ante la todopoderosa Serbia (100-70), que quedó apeada de los cuartos de final tras caer contra Italia.
“Con él es más fácil ganar los partidos”, asegura su compañero Sasu Salin. El alero del Lenovo Tenerife es otro de los jugadores destacados de Finlandia, cuyo juego está pensado para que Markkanen brille en la parcela ofensiva.
Elegido en el número siete del ‘draft’ del 2017 por los Minnesota Timberwolves, que posteriormente lo enviaron a los Chicago Bulls, el jugador de 2,13 metros de altura fue una de las apuestas para apuntalar el futuro de la franquicia de Illinois.
En cuatro temporadas algo lastradas por las lesiones, jugó 221 partido con Chicago siendo un jugador importante en la rotación. Disputó una media de 29,5 minutos por partido promediando 15,6 puntos y 7,1 rebotes. Siendo un ‘rookie’, se convirtió en el jugador que menos tiempo necesitó para anotar 100 triples en la NBA: sólo 41 partidos.
El curso pasado fue traspasado a los Cleveland Cavaliers en una operación múltiple. Con la franquicia de Ohio jugó 61 partidos en los que anotó 14,6 puntos por partido en 30,8 minutos.
El día antes de estrenarse en el Eurobasket Markkanen vio como los Cavs lo traspasaban a los Utah Jazz en la operación que acabaría con Donovan Mitchell en el equipo de Ricky Rubio.
Un movimiento que no parece haberle afectado para afrontar el campeonato, sino todo lo contrario. Markkanen está sacando a relucir todo su talento. La estrella finlandesa aprovecha su envergadura para gobernar bajo los aros y su tiro de media distancia para castigar a sus defensores.
Contra Croacia firmó la mejor actuación de un jugador finlandés en un Eurobasket, un Mundial y unos Juegos Olímpicos. Palabras mayores para un talento que vive su eclosión en el Eurobasket con naturalidad.
“Es fantástico meter 43 puntos, pero me importaba ganar el partido. Sólo intento ayudar al equipo”, resumió Markkanen tras su exhibición contra el equipo balcánico.
La aparición de Markkanen no es una novedad en el baloncesto FIBA. En el Europeo de 2017, ya sobresalió promediando 19,5 puntos por partido, aunque en aquella ocasión su equipo cayó eliminado en los octavos de final a manos de Italia (57-70) en un encuentro en el que el talento finlandés firmó una actuación más que discreta (4 puntos y 3 rebotes).
Markkanen se desquitó este domingo en Berlín de aquella derrota con una exhibición superlativa ante Croacia. El próximo martes (17:15 hora CET) quiere seguir haciendo historia contra España. EFE