Marruecos bloquea a la subcampeona

Enorme despliegue y esfuerzo el que realizó la selección de Marruecos ante la vigente subcampeona del mundo para arrancar un más que meritorio empate que en algún momento del partido pudo convertirse en victoria. Croacia se atascó ante un combinado de fútbol físico, rápido e intenso que fue capaz de cerrarle todos los caminos a Luka Modric e incluso inquietar en más de una ocasión a la zaga europea. Pese a no haber goles, el choque fue entretenido. 

Fue otro partido de este Mundial con mucha pasión sobre el césped, especialmente por parte de los africanos. Comenzaron  ‘los Leones del Atlas’ muy nerviosos, regalando un par de balones en los primeros cinco minutos que a punto estuvieron de costarles un disgusto. Pero a medida que pasaba el tiempo fueron asentándose, apretando a su rival y rondando el área contraria con peligro, alentados por una grada en la que sus aficionados eran amplia mayoría.

No les libró sin embargo ese empuje de un nuevo error en la salida de balón al cuarto de hora de partido que Perisic intentó aprovechar con un disparo lejano que no se marchó demasiado lejos del larguero. Era la primera ocasión del choque, contestada rápidamente por el equipo de Regragui con un centro de Ziyech buscando la cabeza de En-Nesyri al que el delantero no llegó por poco.

Croacia intentaba taponar esa banda derecha del ataque marroquí por la que Hakimi y Ziyech hacían mucho daño y a su vez buscaba controlar el balón para imponer posesiones largas con eje en Luka Modric, algo que no lograba debido en parte a la lentitud de los movimientos croatas y en otra a la intensidad y presión de los africanos. El madridista se veía obligado a retrasar mucho su posición para ir en busca de la pelota y eso facilitaba las acciones defensivas de su rival. Pese a que no había ocasiones, el partido era bonito y muy entretenido.

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Marruecos estaba dando mejores sensaciones, pero fue Croacia la que tuvo dos opciones ya en el descuento del primer periodo. Bono respondió con un paradón a un remate a bocajarro de Vlasic tras centro de Sosa. Y Modric envió por encima del larguero un disparo desde fuera del área. Así se llegó al descanso.

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Dio entrada Dalic a Pasalic en la reanudación por un Vlasic que había terminado tocado la primera parte. No variaba la dinámica de partido, con Croacia teniendo más posesión de balón y Marruecos siendo más incisivo. Un remate de cabeza escorado Mazroui  obligó a Livakovic a intervenir y acto seguido Hakimi sacaba bajo palos un remate de Lovren. El juego iba de un lado a otro.

Mazroui se había lesionado en la jugada de su remate y dejó su puesto a Attiat-Allal al cuarto de hora del segundo periodo. Las cabalgadas de Hakimi por banda derecha seguían haciendo mucho daño a los croatas. Probó el exmadridista en una falta botada en corto pero Livakovic estuvo atento y despejó de puños no sin apuros.

Llegó entonces el turno de Abde, que entró al terreno de juego mediado este segundo tiempo para intentar revolucionar con su talento alguna jugada en ataque. Lo intentó en varias ocasiones, aunque no tuvo fortuna. Respondió Dalic dando entrada a Livaja en ataque. Pasaban los minutos, seguía la intensidad pero no llegaban los goles.

Croacia continuaba atascada, aunque seguía buscando algún resquicio. Los marroquís comenzaban a dar por bueno el empate y ya no se prodigaban tanto en ataque. Los minutos finales mostraron a un conjunto europeo impotente que no conseguía rebasar la primera línea defensiva rival mientras en la grada la hinchada magrebí celebraba una igualada que en algún momento pudo ser algo más, pero que acabaron dando por muy buena.