Masaje facial kobido para embellecernos más

Directamente de Japón llega el masaje facial kobido, ideado para embellecer más nuestro rostro. Y es que como el boom que han tenido los cosméticos orientales es innegable, son pocas las mujeres que se han quedado al margen de los beneficios que pueden llegar a tener tanto las técnicas coreanas como las japonesas.

¿Pero sabías que existe un masaje facial  japonés con el que podemos obtener resultados sorprendentes con tan solo un masaje que se encarga de tratar puntos estratégicos?

Más pureza para piel que llega de Oriente

Según Clínica Ityos, el propósito de esta terapia de 40 minutos de mimos es estimular la relajación de los músculos, ayudar a la generación de colágeno, y reoxigenar la piel. Hay más porque también es un masaje terapéutico que ayuda a combatir el estrés, puede prevenir la aparición de algunas migrañas como las migrañas tensionales.

Esto se consigue, según el protocolo del masaje facial kobido, dermoanalizando primero la piel y determinando sus carencias para escoger el complejo de activos con el que se va a trabajar.

Una vez hecho esto se realiza un desbloqueo a nivel de cuello y cervicales y un masaje sacrocraneal (que libera la tensión muscular, deshace las contracturas del tejido y entre otras cosas, permite una adecuada irrigación sanguínea para que los nutrientes lleguen a todos los rincones).

Además se limpia la piel profundamente para después aplicar la primera parte del activo específico con el conjunto de maniobras faciales adecuadas para el tipo de afección de la piel que se va a tratar.

Algo parecido a llevar nuestra piel al gimnasio

 Con este masaje estamos trabajando también la musculatura facial y como esta tiene memoria, si la acostumbramos a trabajar, el tratamiento perdura en el tiempo y sus efectos son visibles durante un periodo más largo.

Para terminar y tras aplicar la segunda parte del concentrado (que debe reposar 10 minutos antes de interactuar con el masaje elevador de músculos que cuenta con 13 maniobras faciales), se procederá a retirar el exceso de producto una vez la piel haya absorbido todos los nutrientes de este y se finalizará aplicando una crema de día y un sérum que dejarán nuestro rostro completamente luminoso y revitalizado.

A destacar que, según Clínica Ityos, nada más terminar la sesión, el paciente aprecia una remodelación del óvulo facial. Pero para mantener los resultados óptimos y a largo plazo es necesario ser constante. ¡Además se puede combinar con otros tratamientos perfectamente!

 


Source link