A pesar de que el verano es la época del año más especial para muchas de nosotras, hay que reconocer que causa estragos en la piel. Ahora, con la llegada del mes de septiembre es el momento de mimarla y recuperar su vitalidad. La mascarilla de yogur y limón es uno de los mejores remedios caseros que existen para hidratar la piel en profundidad y aliviar el enrojecimiento.
¿Cuáles son los beneficios del yogur? ¿Y del limón?
El yogur es un alimento probiótico con múltiples propiedades que contribuyen a mejorar la salud y el aspecto de la piel. Limpia la suciedad acumulada, desobstruyendo los poros y favoreciendo la oxigenación de la piel. Además, reduce el enrojecimiento, suaviza y aporta firmeza.
En cuanto al limón, es un cítrico con un alto contenido en vitamina C. Además de limpiar la piel de la cara crea una especie de «barrera protectora» para evitar que los radicales libres dañen la piel. También mejora su elasticidad ya que estimula la síntesis de colágeno y elastina.
Preparar la mascarilla de yogur y limón paso a paso
La preparación de este remedio casero no puede ser más sencilla. Los ingredientes son simples: 4 cucharaditas de zumo de limón y 3 cucharadas de yogur natural.
Lo primero es exprimir el zumo de limón. A continuación, se mezcla con el yogur hasta obtener una mezcla homogénea.
Una vez lista la mascarilla, se aplica sobre el rostro completamente limpio, realizando movimientos circulares ascendentes sobre el cuello y la cara. Hay que evitar el contorno de ojos porque la piel de esta zona es muy delicada.
Se deja actuar durante 20 minutos, y, una vez transcurrido el tiempo, se retira con abundante agua tibia. Por último, se aplica una crema hidratante, ¡y listo!
Conviene repetir este proceso dos veces por semana, preferiblemente por la noche.