El nombre de Michael Jordan permanecerá en la historia del baloncesto ligado al de los Chicago Bulls, el equipo que le eligió en la tercera posición del draft de la NBA de 1984 y con el que ganó seis anillos (1991, 1992, 1993, 1996, 1997 y 1998). Sin embargo, todo podía haber sido diferente si los Bulls hubieran aceptado las interesantes ofertas que les presentaron Dallas y Philadelphia el día del draft para hacerse con los servicios del que luego se convertiría en el mejor jugador de todos los tiempos.
Michael Jordan vuelve a estar de plena actualidad estos días por el reciente estreno del documental ‘The Last Dance’
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Según ha desvelado Rod Thorn, general manager de los Bulls en aquellos momentos, “tanto Phildaddelphia como Dallas nos presentaron ofertas interesantes para poder elegir a Jordan en nuestro lugar. Otros equipos también se interesaron pero ninguno con ofertas tan buenas como Sixers y Mavericks. Podemos decir que en aquel tiempo ya había un gran interés por Jordan”, ha explicado Thorn, que atribuye su negativa a aceptar estas proposiciones a una conversación que poco antes había tenido con Dean Smith, entrenador de Jordan en la universidad de North Carolina. “Cada año iba a North Carolina al final de la temporada para utilizar su sala de vídeo para visionar a las mayores promesas de la ACC. Cuando le pedí su opinión sobre Jordan, Smith me dijo: ‘No lo diré nunca públicamente porque no es la manera en que hacemos las cosas pero es el jugador con más talento que he entrenado nunca’”, ha explicado Thorn.
Los Mavs, que elegían en la cuarta posición, se acabaron llevando a Sam
Perkins, y los Sixers, que tenían la quinta, a Charles Barkley. Harold Katz, propietario de los Sixers, explicó hace años que la oferta de su equipo era enviar a Julius Erving a los Bulls a cambio de la elección de Jordan.
En la primera posición de aquel draft de 1984 fue elegido por Houston Hakeem Olajuwon y en la segunda, Sam Bowie por Portland.
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