Tras el triunfo de anoche del Marsella en la cancha del Angers (0-3), el PSG necesita ganar al Niza para recuperar el liderato de la Ligue 1. Un partido en el que Mbappé apunta al banquillo según las informaciones de algunos medios en Francia, que razonan la necesidad del extremo de tener algo de descanso después de haber disputado de principio a fin los dos compromisos de su selección en la Nations League ante Austria y Dinamarca.
Un alto en el camino saludable para Kylian, que tiene por delante once partidos con el PSG en menos de dos meses, el tiempo que queda para que se celebre el Mundial de Qatar. Con el calendario tan apretado, Christophe Galtier está obligado a hacer rotaciones que también involucren a sus futbolistas más importantes, por más que Mbappé, Neymar o Messi no hayan reaccionado de la mejor manera cuando su entrenador les ha sustituido.
Didier Deschamps ya reclamó públicamente que se regulara el tiempo de Mbappé sobre la cancha: “Sé que Christophe Galtier quiere que Mbappé juegue pero de vez en cuando necesita respirar un poco. No tiene que disputar todos los minutos”, dijo el seleccionador durante la reciente concentración de Francia, pensando ya en que sus jugadores tienen que llegar frescos a finales de noviembre para intentar revalidar el Mundial.