Los Angeles Lakers ya tienen cerrada su plantilla definitiva para asaltar el título NBA. El último puesto libre lo ocupa, desde que se anunció de forma oficial durante la victoria sobre los Toronto Raptors de anoche por 101-110, el escolta de 28 años Ben McLemore.
El jugador, cortado por los Houston Rockets el pasado fin de semana, aportará ocho años de experiencia en la liga y una muñeca prodigiosa desde la larga distancia para reforzar las opciones de repetir anillo del equipo de L.A.
El número siete del Draft de 2013 tiene unos porcentajes de carrera del 36,3% desde la línea de tres, pero
en las últimas dos temporadas ha subido sus promedios hasta el 40,2% de acierto.
En 32 partidos esta temporada, McLemore ha promediado 7,4 puntos y 2,1 rebotes por encuentro, bajando su acierto de tres al 35,7%. Los Lakers confían, sin embargo, en poder recuperar la mejor versión del jugador, que ha jugado la mayor parte de su carrera con los Sacramento Kings.
El año pasado, en la segunda ronda de playoffs, McLeMore enlazó una racha de 6 de 12 en tiros de tres con los Rockets que complicó algo la clasificación de L.A. para las Finales de Conferencia de la NBA. “Ben eleva nuestra capacidad de anotar de tres y nos permite abrir espacios para jugar contra los dos contra uno y penetrar y abrir el balón, un elemento básico en la NBA moderna”, analizó Frank Vogel, entrenador de los angelinos.
El fichaje se ha analizado también como un nuevo golpe de LeBron James y su agente Rich Paul, que lleva ahora hasta seis jugadores de los quince totales de la plantilla de los Lakers: el propio LeBron, Anthony Davis, Montrezl Harrell, Talen Horton-Tucker, Kentavious Caldwell-Pope y ahora Ben McLemore.
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