Uno de los protagonistas de la actualidad en la Real es Ander Guevara. Titular en los tres últimos partidos de Anoeta, contra pronóstico porque empezó la Liga como claro suplente, admite que ganar al Betis “era necesario” y considera que fue una “inyección de moral”. El canterano advierte de que “no nos conformamos”.
“Vemos que estamos en el buen camino”, reconoce Guevara, con un punto considerable de cautela. Recalca que son “los primeros en pensar en progresar después de cada partido” y desvela que “es lo primero que nos dijo el míster el otro día, que nos equivocaríamos si pensamos que somos invencibles”.
La Real puede ser colíder si gana al Celta el domingo. “No es algo a lo que le estamos dando importancia”, dice Guevara, aunque matiza luego que “nos queremos enganchar a los equipos punteros” de la clasificación. “Nos centramos en el trabajo diario”, agrega el pivote. En su opinión, “es importante ser ambiciosos, la plantilla es completa y competitiva. Sin ponernos límites y presiones añadidas, sólo pensamos en ganar el siguiente partido”, explica.
Guevara es la sorpresa de las últimas alineaciones y de momento, cumple. “Soy consciente de que llevo cuatro partidos en la élite, me queda mucho por trabajar y mejorar”, declara el gasteiztarra. “Considero que no es fácil el salto de Segunda B a Primera”, aunque “mi rendimiento es bastante bueno”, apunta.
Hay dos categorías de diferencia. “El nivel es mayor en todos los sentidos”, razona, subrayando que “el ritmo cambia mucho, el error se paga más caro y hay que estar muy acertado”. Todo “depende de la personalidad de cada jugador. Es difícil atreverse a todo lo que haces en el Sanse. Voy mejorando, cada partido me noto más suelto”, se sincera Guevara.
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