El exjugador de los Chicago Bulls Michael Jordan no verá ni un duro de los ingresos comerciales por la explotación del documental El último baile, del que es protagonista y productor. Según la revista Forbes, los beneficios para la leyenda de la NBA ascenderían hasta los 3 o 4 millones de dólares, unas ganancias que MJ donará a iniciativas benéficas.
El documental, que fue anunciado en 2018 de manera definitiva, fue recibido este domingo en Estados Unidos con una media de 6,1 millones de espectadores en la ESPN, y todavía se desconocen las cifras totales de audiencia tras su distribución el lunes en distintos países a través de la plataforma de streaming Netflix. Debido a la pandemia del coronavirus, la ESPN decidió acelerar la fecha de estreno, prevista originalmente para junio de este año.
A pesar de que Jordan no se beneficiará del metraje económicamente, se especula que la voluntad del exjugador para rescatar las cintas grabadas hace más de dos décadas es la de reafirmar su legado como el mejor jugador de todo los tiempos, especialmente entre las generaciones más jóvenes que han vivido solamente la época de Kobe Bryant y LeBron James. Con el documental, algunos podrán recordar esos años brillantes de Chicago, mientras que otros descubrirán hasta que punto Michael Jordan impactó el mundo del baloncesto y la NBA.
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