El año pasado, cuando Mick Schumacher debutaba en la Fórmula 2, decepcionó con su rendimiento. No se adaptó a la categoría como muchos esperaban. Debía mejorar con la gestión de las gomas, ser mucho más constante y tomar mejores decisiones en los momentos clave. Cometía demasiados errores y generaba dudas sobre si realmente podía alcanzar la F1. Estaba muy verde. Pero un año después, el alemán ha hecho todo lo que debía hacer para cambiar su situación. Empezó el curso dubitativo y con más fallos, con todas las miradas puestas en él y toda la presión. Veía como su compañero debutante, Shwartzman, le superaba en las citas iniciales y se hacía con el liderato. Pero Mick cambió el chip desde Spa, exhibiendo la consistencia que se le pedía y la solvencia necesaria para merecerse el ascenso a la Fórmula 1. Se metió en la pelea por el título en Monza con su primer triunfo del curso, el segundo en dos años en la F2. Asumió el liderato del Mundial en la cita posterior, en Mugello. Y en la primera carrera del fin de semana en Rusia, tras ser tercero en clasificación, logró su segunda victoria del curso para ampliar su margen en lo alto de la general de la categoría de plata.
Mick lo hizo todo bien en la primera manga en Sochi. Realizó una buena salida, mantuvo un buen ritmo durante toda la carrera, gestionó bien las gomas y superó al piloto de Red Bull y Honda, Tsunoda, a falta de 9 giros con una gran acción.
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A partir de ahí, se dirigió hacia una victoria con la que se acerca no solo al título de Fórmula 2, también a su sueño de debutar en la Fórmula 1. Hace unos días, en Italia apuntaban que Haas podría fichar a un piloto experto como Checo Pérez y darle el segundo asiento a Mick como parte de su buena relación con Ferrari. Y el jueves, antes del GP de Rusia, el jefe de la escudería estadounidense, Gütnher Steiner, no rechazó la posibilidad de estudiar la opción de incorporar a uno de los jóvenes pilotos de la academia de Ferrari en su formación oficial para 2021. Se refería a Mick Schumacher, Callum Ilott y Robert Shwartzman, aunque sin duda, el que más opciones tiene de conseguir el ascenso es Mick.
La voluntad de Ferrari es que se foguee en un equipo como Haas o Alfa Romeo para poder ganar experiencia en la F1 de cara a un posterior ascenso a Ferrari en un futuro, el sueño de Mick y de muchos ‘tifosi’ ferraristas, que anhelan ver el apellido Schumacher de nuevo en un bólido rojo.
Claro líder del Mundial
Sin embargo, nada está confirmado. Por ahora, Mick Schumacher está dando los pasos necesarios para conseguirlo incluso si no gana la categoría. Pero sin duda, el camino hacia un debut en la F1 en 2021 estaría mucho más claro si el alemán de 21 años logra conquistar el título de la categoría de plata, puesto que el ganador de la F2 no puede repetir otro año en esta misma clase.
De momento, a falta de 5 carreras por disputarse (1 este domingo en Rusia y 4 en Bahrein) Mick Schumacher aventaja al otro piloto de la academia de Ferrari, Callum Ilott, con 186 puntos por los 168 del británico. Mick tiene 41 puntos de margen sobre el tercer y cuarto clasificado, Lundgaard y Tsunoda, y 46 sobre
Shwartzman.
El germano intenta mantenerse al margen de cualquier rumor y de sus opciones de triunfo. Solo piensa en la siguiente carrera: “Estoy centrado, al cien por cien, en la temporada de F2 y aún no ha terminado. Me preocupa la carrera del domingo. Es bonito ganar aquí, tuvimos ritmo todo el fin de semana y me alegro por los aficionados. Escogimos bien a la hora de configurar el coche y comprometer algunas cosas”, expresó Mick tras su triunfo. Cada vez está más cerca de la Fórmula 1.
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