Miguel Oliveira no está teniendo el inicio de año esperado. El portugués iniciaba su nuevo reto con el RNF Aprilia este curso lleno de ilusión, con ganas de ser competitivo y liderar al conjunto en busca de grandes resultados. Pero la mala suerte le persigue en estas primeras carreras.
Si en la primera cita, en casa, fue arrollado por Marc Márquez, lo que le provocó un abandono en Portimao y no poder competir en Argentina, en la cuarta cita del curso, volvió a ocurrirle algo parecido. Esta vez fue Fabio Quartararo el que, tras caerse en la salida de la cita dominical en Jerez, se llevó puesto a Oliveira. En un principio, parecía sufrir una luxación, pero tras un posterior chequeo en el Hospital de Jerez de la Frontera, se le detectó una fractura en el húmero del hombro izquierdo
Así lo anunció el equipo RNF Aprilia en un comunicado: “Después de que el equipo del centro médico del Circuito de Jerez – Ángel Nieto, que atendió a Miguel, detectara de inmediato una luxación del hombro izquierdo y se lo recolocara, las exploraciones posteriores en el Hospital de Jerez de la Frontera demostraron a última hora del domingo que el daño fue mayor de lo esperado y reveló una pequeña fractura en el húmero de su hombro izquierdo. Se someterá a más controles esta semana”.
La próxima cita de MotoGP será en dos semanas, del 12 al 14 de mayo en Le Mans. Habrá que ver si el piloto portugués, que ya se perdió la cita de Argentina, podrá competir en la prueba francesa y si puede hacerlo al máximo nivel.