La suspensión del Clásico ha otorgado a los jugadores del Real Madrid un ‘tiempo extra’ de cara su puesta a punto. Así, uno de los beneficiados ha sido Luka Modric que, tras el último parón de selecciones, llegó volvió tocado y no pudo estar en los duelos ante Mallorca y Galatasaray.
En la última semana, ha estado entrenando en solitario pero, en las últimas dos sesiones, ya ha podido ejercitarse junto al grupo con total normalidad.
En ese tiempo, tanto Kroos, pero sobre todo Valverde, han ‘enamorado’ a la afición blanca de nuevo. Les ha bastado solo un partido, el de Estambul, pero lo cierto es que aportaron tantos aspectos positivos que parece difícil que salgan del once en un corto periodo de tiempo si las lesiones les respetan.
Teniendo en cuenta, además, que Casemiro también resulta innegociable, todo apunta a que a Luka
Modric le costará hacerse con el puesto de titular en el Real
Madrid. El croata, que aún así no ha sido de los que más bajón de rendimiento ha dado en el último año se ve una situación nueva para él. La de ser suplente tras años comandando en el centro de la sala de máquinas del Bernabéu.
Será pues una temporada complicada para Modric en la que, además, cumple contrato en el mes de junio de 2020 y no hay visos de renovación.
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