Empieza un nuevo año y una nueva aventura. Empieza también un nuevo libro que será publicado a diario para que ustedes sigan disfrutando con nosotros de aquello que tanto nos gusta. Es por eso que este escrito se ha construido a base de pequeños granitos de arena con aportaciones de recuerdos que han quedado en sus memorias durante un año histórico.
El 2022 ha dejado muchos momentos que permanecerán en la retina del pueblo ‘gironí’. Algunos más, otros menos, pero todos determinantes. El hito por excelencia ha sido el regreso a Primera División. Hicieron falta dos finales fatídicas para disfrutar, de una vez por todas, de la gloria en la máxima categoría del fútbol español. El fútbol le debía una a Montilivi y lo bueno se hizo esperar, pero también se hizo sufrir. Y de qué manera.
Muchos también han recordado con mucho cariño el partido de las semifinales del play-off frente al Eibar. El equipo viajaba con el marcador, los antecedentes y las opiniones de los expertos en contra, pero el fútbol y el ‘Orgull Gironí’ demostraron ser, como siempre, una caja de sorpresas. El golazo de Borja en el primer minuto y el de Stuani en el último dieron un pase agónico a la final que, posteriormente, ganarían.
Si ‘Los Payasos de la Tele’ marcaron un antes y un después en la infancia de muchos niños, también lo marcaron Míchel y Samu Saiz en la imagen de la celebración del ascenso para la afición rojiblanca. ‘Los payasos gerundenses’ se abrazaron como nunca antes se había visto. Atrás quedaba el “¡Payaso!” de Samu Saiz al técnico vallecano en aquel encuentro en que el jugador madrileño fue sustituido antes de la media parte. Se quitó la camiseta para tirársela, y eso que el míster estaba sancionado en la grada.
Aunque si hablamos de celebraciones durante el ascenso, no puede olvidarse una de las imágenes que corrieron como la espuma por redes sociales. La fotógrafa del club, Nuri Marguí, se quedó enzarzada con uno de los árboles de la ciudad mientras captaba las fotografías de la rúa en el autobús descapotable. Arnau Martínez pasó de ser uno de los héroes de la final al salvador de la celebración. El carrilero no soltó el tobillo de Nuri, dejándolo todo en anécdota que, por suerte, no llegó a males mayores.
Una de las imágenes para la historia de la ciudad fue la de los dos capitanes en el balcón del ayuntamiento. Cristhian Stuani y Marc Gasol alzaron los brazos delante de miles de aficionados en la Plaça del Vi de Girona. Fútbol y baloncesto lograron lo que ninguna ciudad había logrado antes, lograr un ascenso a Primera el mismo día.
La ilusión de la afición en Montilivi no podía quedarse atrás. Una temporada más, muchos fieles llenaron de ambiente el lugar en el que siempre sufren por los suyos. El 2022 dejó muchas olas que rodearon los asientos del feudo rojiblanco. También destacaron cánticos como el de ‘Míchel catalá’. Algo ha calado del míster, dentro y fuera del verde.
También han tenido su lugar partidos locos como el de Valladolid en Pucela, el de Almería en el Power Horse Stadium o el de Burgos en El Plantío. Frente a los blanquivioletas se vivió una exhibición por parte de ambos conjuntos, frente a los andaluces se lograron tres puntos agónicos con dos penaltis visitantes fallados y frente a los burgaleses pudo mascarse la tragedia de no ser por la mano de Juan Carlos. El Girona entró en play-off mientras los jugadores del Oviedo celebraban el pase a la fase final por una locución que cantó un gol inexistente del Burgos. La imagen del antes y el después en el Carlos Tartiere suponía un contraste total de emociones. De la alegría absoluta a la más horrorosa de las tristezas.
Por último, cabe destacar el mes de marzo. El mes en el que se logró el pleno de victorias y la etapa en la que, tras dejar el descenso, se empezó a creer en el milagro por los buenos resultados. Y fíjense. Aquí nos encontramos, en Primera. Por muchos años más. Feliz 2023.