Álvaro Morata, jugador del Atlético de Madrid, la levantado la voz para pedir más respeto para el conjunto rojiblanco y para denunciar el doble rasero que se tiene en el fútbol español con unos u otros equipos. Lo ha hecho en una entrevista en Marca.
El delantero recordó su expulsión en Mallorca: “No insulté a nadie. Lo único que hice fue encararme porque no soy de piedra. Vino a por mí y me dijo cosas que no están bien. Ya está. Me gustaría pedir disculpas a mi afición por dejar al equipo con 10 y no poder jugar el siguiente encuentro. Pedí perdón en el vestuario. No lo merecían. Pero yo tengo la conciencia tranquila”, señala.
Morata no se mordió la lengua cuando le preguntaron por lo ocurrido con otras acciones parecidas con Sergio Ramos o Luis Suárez como protagonistas: “Creo que al final no sale igual mediáticamente sancionar a todos de la misma manera. Sí, está claro. Sólo hay que ver las imágenes y los partidos. Ya lo dije con la sanción a Costa, que habría sido difícil verlo en otros jugadores de LaLiga. En mi caso ya he dicho que me he equivocado. Tienen que considerar al Atlético como un equipo grande. Que nos respeten, en ocasiones no nos miran como a otros equipos”, apunta.
Y añade: “Al final arbitrar no es fácil. Hay cosas difíciles de ver. Es verdad que a la hora de poner sanciones nos ponen como ejemplo y a los demás no. A uno le choca. La frase de Diego Costa en el Camp Nou era una frase que decía siempre. La decía por estar enfadado. Ocho partidos es una locura. Luego otros jugadores lo dicen y no pasa nada”.
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