El máximo organismo del fútbol europeo decidió ayer que el Real-City se dispute el martes nueve de mayo, solo tres días después de la final de la Copa del Rey contra Osasuna
Florentino y Ceferin, en una imagen de archivo del año 2018
En las altas esferas del Real Madrid cunde un profundo malestar con la UEFA después de conocerse las fechas de los partidos de las semifinales de la Champions. El máximo organismo del fútbol europeo confirmó ayer que el Real Madrid-City de ida de semis se disputará el martes 9 de mayo en el Santiago Bernabéu y que la vuelta tendrá lugar en el Etihad ocho días después el miércoles 17 de mayo.
El mosqueo en el seno del club blanco llega porque el encuentro de ida se jugará solo tres días después de la final de la Copa del Rey del sábado seis de mayo contra Osasuna en La Cartuja de Sevilla (22.00 horas).
Los dirigentes habían solicitado a la UEFA que pusiera el Madrid-City el miércoles 10 de mayo para tener un día más de descanso pero el organismo presidido por Aleksander Ceferin ha hecho caso omiso a la petición blanca y ha decidido que sea el Milan-Inter el encuentro que se dispute el miércoles 10 de mayo.
Por lo tanto, el equipo de Carlo Ancelotti tendrá menos de 72 horas para poder preparar el decisivo encuentro contra el Manchester City de ida de las semifinales de la Champions.
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