El Espanyol afronta el quinto capítulo de la era Pablo Machín con la obligación de sumar los tres puntos por primera vez esta temporada en el RCDE Stadium.
El conjunto blanquiazul necesita imperiosamente regresar a la senda del triunfo tras el sonoro tropiezo en San Mamés, donde las buenas sensaciones que traía el equipo tras la llegada del nuevo entrenador se fueron al garete a las primeras de cambio por culpa de dos errores de bulto en la retaguardia.
Además de su falta de mordiente habitual en ataque (Machín reclama el fichaje de un 9 en el mercado de invierno), el Espanyol echó por tierra su mejoría defensiva con varios despistes que no puede permitirse un equipo que quiere salir de la zona baja.
Hoy, ante el impredecible Valencia de Albert Celades, el Espanyol intentará dar carpetazo de una vez por todas a su gafe liguero en Cornellà-El Prat. La afición perica aún no ha visto a su equipo puntuar (0 de 15) y el único tanto celebrado a estas alturas fue de Zaldúa en propia puerta en la derrota frente a la Real Sociedad (1-3).
Así las cosas, el naciente proyecto de Pablo Machín requiere de un triunfo para consolidar su idea a ojos de los jugadores y para rebajar la angustia de club e hinchada, preocupados por la deriva del equipo en el campeonato liguero. Vuelven a la lista Melendo y Corchia y se caen, por decisión técnica,
Mala dinámica ché
El Espanyol sigue anclado en los puestos de descenso y la victoria aliviaria las urgencias clasificatorias al tiempo que pondría en aprietos a un Valencia incapaz de encontrar la regularidad a las órdenes de Albert Celades. El conjunto ché aterriza en Cornellà-El Prat casi con la misma obligación de ganar que su rival, pues suma cuatro partidos consecutivos sin conocer la victoria.
Para el vital choque de hoy el entrenador andorrano recupera a los sancionados Rodrigo y Cheryshev, pero la mala noticia para los visitantes sigue estando en la enfermería. El técnico andorrano tiene bajas de consideración en ataque y no podrá contar con Gameiro, Guedes ni Carlos Soler. Otra ausencia sensible es la de Coquelin, uno de los hombres más destacados de la era Celades.
