Casa de la localidad costera valenciana de Miramar, donde el sábado por la noche murió una mujer octogenaria al golpearse en el suelo tras ser empujada por su marido.Natxo Francés (EFE)
Una mujer de 87 años ha fallecido este sábado por la noche al golpearse contra el suelo tras ser empujada por su marido, de 88 años, en su domicilio de Miramar (Valencia). La Guardia Civil investiga si se trata de un accidente o de un caso de violencia machista.
Al parecer, el matrimonio, ambos con movilidad reducida, inició una discusión a última hora del sábado y en un momento dado el hombre, según manifestó él mismo posteriormente, empujó a su esposa y esta se dio un golpe contra el suelo y murió, según han informado fuentes de la Policía Local de Miramar, localidad de 2.740 habitantes situada a 77 kilómetros de Valencia.
El hombre salió a la calle asustado y contó lo que había pasado a un repartidor de pizza que se encontraba en la vía pública. El suceso ocurrió entre las 22.30 y las 23.00 de este sábado, y la Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación para determinar si la muerte de la mujer se produjo a consecuencia de un accidente o se trata de un caso de violencia machista. Según ha comprobado la Guardia Civil, no había denuncias previas por violencia de género.
La alcaldesa de Miramar, Pilar Peiró, confía en “que no se trate de un caso de violencia de género y solo sea un hecho desgraciado”, ya que el hombre tiene un grado superior de dependencia que la mujer fallecida, según declaraciones recogidas por el periódico local Las Provincias. “De hecho, era ella quien le cuidaba a él, pese a que también tenía movilidad reducida y precisaba de muletas para poder caminar”, ha agregado la primera edil.
Encarnación Ramírez, vecina de la mujer fallecida, ha asegurado que ambos son “muy buenas personas” y siempre iban juntos. La vecina ha asegurado a EFE-TV estar acongojada por lo sucedido este sábado. Ha detallado que ambos tenían problemas de movilidad, la mujer fallecida, se movía con la ayuda de dos muletas y el hombre, de 88 años y con problemas de demencia senil, se desplazaba en silla de ruedas.
Según este testimonio, los hijos del matrimonio están en Alemania y habían viajado a Miramar para permanecer durante una semana, y este sábado se marcharon. Un hijo de la vecina ayudaba al matrimonio cuando tenían que trasladarse fuera de su domicilio.
De comprobarse el carácter de violencia machista del caso, se trataría de la segunda víctima en la Comunidad Valenciana en los últimos ocho días tras la muerte de una joven el pasado 25 de diciembre en Elche por un disparo, supuestamente, efectuado por el que era su pareja, ahora en prisión provisional.
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