Al menos 45 migrantes africanos han muerto en el peor en la costa libia en lo que va de año, han informado este miércoles dos agencias de Naciones Unidas. En un comunicado, la agencia de la ONU para los refugiados, ACNUR, y la Organización Internacional de Migraciones (OIM) señalan que “unas 37 personas, principalmente de Senegal, Malí, Chad y Ghana, fueron rescatadas por pescadores locales y posteriormente detenidas tras desembarcar”. Los supervivientes señalaron que otros 45, cinco de ellos niños, habían muerto cuando el motor de la embarcación explotó en la costa libia de Zwara.
El naufragio eleva a al menos 302 los muertos en esta ruta en lo que va de 2020, indicaron las agencias. En los últimos meses, cientos de migrantes han sido detenidos en el mar y sus embarcaciones, enviadas de vuelta a Libia pese a la situación de violencia en el país. El Proyecto Migrantes Desaparecidos, vinculado igualmente a ACNUR y la OIM, advierte de que es muy probable que el número sea mucho mayor, ya que cada semana salen numerosas “embarcaciones fantasma” de Libia sin que haya registro de ningún tipo.
Libia, inmersa en una guerra, es una de las principales rutas para los migrantes que tratan de acceder a Europa. Actualmente se estima que el país alberga en torno a 654.000 de ellos. A menudo viven en condiciones precarias, con escaso acceso a los cuidados sanitarios.
Los barcos estatales libios se han responsabilizado de los rescates ante la ausencia de un programa de la Unión Europea y más de 7.000 personas han sido devueltas al país este año, indica el comunicado. ACNUR y la OIM apuntan que Libia no debería ser considerado un puerto seguro para los migrantes ni estos deberían ser desembarcados allí, y proponen un sistema alternativo por el que las personas rescatadas o interceptadas sean llevadas a puertos seguros.
“Cuando los buques comerciales sean el barco más cercano capaz de realizar un salvamento, se les debería proporcionar rápidamente un puerto seguro para el desembarco de los pasajeros rescatados. No se les debe dar instrucciones para que devuelvan a personas a Libia, donde corren el riesgo de sufrir el conflicto en curso, graves violaciones de derechos humanos y detenciones arbitrarias tras el desembarco”, explicaron las agencias en el comunicado. “Es urgentemente necesario fortalecer los actuales dispositivos de búsqueda y rescate para responder a las llamadas de auxilio”, agregaron.
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