La estrella del fútbol Diego Armando Maradona falleció a causa de insuficiencia cardíaca que generó un edema agudo de pulmón, confirmó la autopsia divulgada este miércoles.
Su cuerpo fue trasladado a una casa velatoria en el barrio La Paternal de Buenos Aires, en donde lo recibió una multitud de fanáticos. Los restos mortales de Diego Maradona serán velados en la Casa Rosada, la sede del gobierno nacional de Argentina, informó la agencia estatal de noticias Telam.
Numerosos argentinos aplaudieron desde los balcones y los monumentos de la ciudad se iluminaron de celeste a la 10 de la noche en homenaje a Maradona, quien utilizaba ese número de camiseta cuando jugaba. En tanto, estadios de fútbol de toda Argentina encendieron sus luces a la misma hora.
El astro del fútbol murió alrededor del mediodía en la casa que alquilaba en San Andrés, un barrio en el norte de Buenos Aires donde se recuperaba de una operación de edema craneal que se le practicó el 3 de noviembre, su último tropiezo de salud.
La última vez que se vio en público a Maradona fue el 30 de octubre, cuando cumplió 60 años y con motivo del partido entre Gimnasia y Esgrima frente a Patronato por la liga local.
Era la imagen de una persona muy desmejorada y casi incapaz de movilizarse por sus propios medios. Tras ser trasladado a la residencia de San Andrés, Maradona recibía todos los días la visita de un psicólogo y una psiquiatra y era acompañado de un enfermero permanentemente.
Hablamos con varios sobre la huella que les deja la leyenda del fútbol. Para muchos, era un dios.
El presidente argentino Alberto Fernández dispuso tres días de duelo nacional. “Nos llevaste a lo más alto del mundo. Nos hiciste inmensamente felices. Fuiste el más grande de todos. Gracias por haber existido, Diego. Te vamos a extrañar toda la vida”, publica el mandatario en Twitter.