Una mujer estadounidense murió y otros cuatro pasajeros resultaron heridos cuando una enorme ola golpeó el crucero Viking Polaris mientras navegaba hacia el puerto de Ushuaia, en el sur de Argentina, en un crucero por el Antártico, dijeron las autoridades.
La mujer, de 62 años, fue herida por los cristales rotos cuando la ola rompió las ventanas del camarote a última hora del martes durante una tormenta, según las autoridades argentinas. El barco sufrió daños limitados y llegó a Ushuaia, a 1,926 millas al sur de Buenos Aires, al día siguiente.
“Con gran tristeza confirmamos que un huésped falleció tras el incidente”, dijo Viking en un comunicado. “Hemos notificado a la familia del huésped y compartimos nuestras más profundas condolencias”.
Ni el comunicado ni la Prefectura Naval Argentina identificaron a la mujer ni su ciudad de origen.
Viking lo calificó de “incidente con una ola rebelde” y dijo que las lesiones de los otros cuatro pasajeros no ponían en peligro su vida.
Una pareja de Carolina del Norte a bordo del barco dijo a la filial de NBC WRAL que pensaron que “habíamos chocado con un iceberg” cuando la ola se estrelló contra el crucero.
“Aquí no hay glaciares, pero eso es lo que se sintió”, dijo Suzie Gooding.
Gooding dijo a la emisora de noticias que el impacto fue “impactante” porque ocurrió tan repentinamente.
“No sabíamos si debíamos preparar nuestro equipo para abandonar el barco”, añadió.
El crucero estaba anclado cerca de Ushuaia, donde un tribunal federal ha abierto una causa para determinar lo ocurrido.
El Servicio Nacional de Océanos de la NOAA describe estas olas “rebeldes” como “paredes de agua” que suelen tener lados empinados con valles inusualmente profundos.
“Las “rogue”, llamadas “olas de tormenta extremas” por los científicos, son aquellas olas que son mayores que el doble del tamaño de las olas circundantes, son muy impredecibles y a menudo vienen inesperadamente de direcciones distintas a las del viento y las olas predominantes”, explica la agencia.
La compañía indica en su página web que para explorar regiones remotas del mundo cuentan con “dos pequeños barcos de expedición construidos a propósito y de última generación: Viking Octantis y Viking Polaris”.
El Viking Polaris, un barco con instalaciones de lujo y construido en 2022, tiene capacidad para 378 pasajeros y 256 miembros de la tripulación.
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