El base de los Atlanta Hawks Trae Young se fue caliente a casa tras al ajustada derrota contra los Dallas Mavericks por 118-117 al considerar que los árbitros no le pitaron una falta a su favor en la última posesión del encuentro.
Ya con el bocinazo final habiendo dictado sentencia, Young se abalanzó contra uno de los árbitros del partido y le propició insultos de todo tipo, una secuencia que captaron perfectamente las cámaras de televisión.
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La bronca le costará 20 000 dólares a la joven estrella de los Hawks, que declaró su frustración tras registrar 25 puntos y 15 asistencias en la derrota: “No me voy a alejar del balón a cuatro segundos del final cuando intentamos ganar el partido. No me voy a caer por caerme al final. Es lo más frustrante, no tener la oportunidad de hacer la jugada”.
Hasta Luka Doncic, con cara de circunstancias, intentó ir a calmar a Young, que fue elegido por los Mavs en el número cinco del Draft de 2018 y traspasado por el esloveno (número tres) esa misma noche.
Además de la multa, la NBA también comunicó que no hubo falta en la jugada por parte de Willie Cauley Stein.
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