Murillo Karam seguirá en la cárcel; juez refrenda prisión preventiva

Murillo Karam seguirá en la cárcel; juez refrenda prisión preventiva

Un juez federal negó la posibilidad de conceder prisión domiciliaria al ex procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, tras argumentar que persiste el riesgo de fuga y de que el estado de salud del ex servidor público “ha mejorado” tras diversas visitas al hospital.

En una audiencia celebrada entre la noche de ayer y madrugada de este viernes, el Juez Especializado en el Sistema Penal Acusatorio, Marco Antonio Fuerte Tapia, consideró que Murillo Karam deberá continuar privado de su libertad mientras esté sujeto a un proceso penal por los delitos de tortura y desaparición forzada de personas.

Sin embargo, determinó que el ex procurador y ex gobernador de Hidalgo cumpla con la prisión preventiva justificada a la que está sujeto en la Torre Médica de Tepepan que maneja el Sistema Penitenciario de la Ciudad de México.

Además, el juez de control otorgó a la Fiscalía General de la República (FGR) una prórroga de tres meses para continuar con la investigación complementaria, plazo que se vence hasta el 24 de febrero de 2023.

La defensa de Murillo Karam, a cargo del abogado José Javier López García, se mostró “sorprendida” por la resolución del juez Fuerte Tapia y anunció que va a presentar un recurso de apelación para tratar de revocar la prisión preventiva justificada y lograr su cambio por una medida cautelar que le permita continuar su tratamiento médico en libertad.

El abogado López García afirmó que la determinación del juez demuestra el delicado estado de salud de Jesús Murillo Karam, ya que se ordenó que la prisión preventiva justificada se cumpla en la Torre Médica de Tepepan, reconociendo así que su estado de salud “es reservado y requiere tratamiento y observación tal como lo han señalado sus médicos tratantes”.

“Estamos sorprendidos de que a pesar de la irrefutable evidencia médica, el juez de control haya decidido anteponer la política criminal a la vida de un ser humano, manteniendo como argumento el riesgo de fuga”

En este marco, la defensa recordó que desde la detención del ex titular de la PGR el 19 de agosto de este año, ha sido trasladado a hospitales en cinco ocasiones y se le ha tenido que realizar una intervención quirúrgica para evitar una embolia, por lo que no se puede considerar que una persona con de más de 70 años con padecimientos que requieren atención especializada, pueda pensar en darse a la fuga.

La defensa agregó que desde el inicio del procedimiento, se advirtió a las autoridades que Jesús Murillo Karam padece enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), hipertensión arterial sistémica e insuficiencia vascular cerebral, los cuales se han acrecentado desde que se le dictó prisión preventiva justificada.

Uno de los argumentos que la defensa esgrimió ante el juez Fuerte Tapia es que desde el pasado 19 de octubre, Murillo Karam no ha podido regresar al Reclusorio Norte en el que había sido internado, justamente por su delicado estado de salud.

#MurilloKaram continuará en prisión preventiva justificada, así lo determinó el juez federal Marco Antonio Fuerte al negar la prisión domiciliaria por considerar riesgo de fuga. Permanecerá en la Torre Médica Tepepan hasta que se restablezca su estado de salud. #Ayotzinapa pic.twitter.com/ewFFrldg5s

— Jesús velázquez (@pandavelazquez) December 2, 2022

Por el contrario, su estado de salud se ha complicado, por lo que ha estado en cuatro hospitales públicos diferentes para recibir atención médica: Hospital General de Xoco; el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez”, donde se le práctico de emergencia una cirugía de la arteria carótida de alto riesgo para evitar una embolia, el Hospital Belisario Domínguez y la propia Torre Médica de Tepepan, en la que seguirá interno.

A pesar de ello, el juez federal se negó a cambiar la medida cautelar de prisión preventiva justificada por una medida que le permitiera a Murillo Karam continuar su proceso penal sujeto a algún tipo de libertad condicionada, o inclusive, en prisión domiciliaria.




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