Nàstic y Elche se dan un homenaje en el Nou Estadi

Nàstic de Tarragona y Elche CF, sin nada en juego, brindaron un festival de goles en un partido que el conjunto catalán empató in extremis tras ir perdiendo por 0-3 en el minuto 78.

Un Nàstic, con protagonismo de la cantera en su alineación, salió a por todas, para intentar no volver a fallarle a una afición que ya ha asumido que jugará la próxima campaña en Segunda División B y que no acudió al campo como en otras ocasiones a causa de la mala situación de los suyos.

El joven delantero Pol Prats fue el hombre que llevó el peligro ofensivo de los locales, con acciones en las cuales el menudo futbolista siempre quería bastarse de su velocidad para zafarse de los contrarios. Lo intentó en varias ocasiones e hizo sufrir a Dani Calvo.

La primera gran ocasión del duelo la tuvo un Nàstic que a los 20 minutos a punto estuvo de adelantarse en el marcador, gracias a un testarazo de Viti a la salida de un córner que obligó a Edgar Badia a alzar el vuelo para desviar el peligro.

Justo antes de la media hora de juego, los tarraconenses volvieron a crear peligro por medio de Uche, pero su disparo lo volvió a rechazar el meta de los ilicitanos.

Pese a que los catalanes eran los que llevaban el peso del duelo, fue el Elche quien marcó en el primer acto. Xavi Torres lo vio claro y disparó desde muy lejos en el minuto 31, con la suerte que a Bernabé se le escurrió el esférico y este acabó en el fondo de la red.

La mayor parte de la acción se trasladó a la segunda mitad. El conjunto de Pacheta amplió distancias en el electrónico por medio de una diana de Carlos Castro desde los once metros a causa de un inocente penalti cometido por Viti.

Juan Cruz dejó a los visitantes con un hombre menos a la hora de juego, hecho que no impidió al Elche a continuar con la fiesta y marcar el tercer gol en el minuto 70, obra de Josán tras un gran pase de Iván Sánchez.

Parecía todo sentenciado, pero el Nàstic se transformó y empató en tan sólo seis minutos. Empezó la remontada Uche en el minuto 78, batiendo a placer a Edgar Badia, que había dejado un esférico muerto en el área tras un testarazo de Noguera.

Continuó el Nàstic marcando gracias a Neider, que remató en propia meta un centro rival en el minuto 83. En la siguiente acción, Luis Suárez fusiló a Badia con un trallazo desde dentro del área.

Los tres goles dieron esperanzas a un Nàstic que se creció y asedió al rival, incluso tras la expulsión de Pol Valentín, que igualó las fuerzas sobre el césped.

El debutante Sun pudo desequilibrar la balanza en la última acción del partido, pero el marcador se mantuvo inalterable.