Hace meses, tras conocerse la sanción de Red Bull por superar el límite presupuestario de 2021, el equipo de las bebidas energéticas destacaba lo mucho que le podía perjudicar la sanción de la reducción del tiempo disponible de túnel de viento y simulaciones CFD para el desarrollo de su coche de 2023. Sin embargo, su gran ingeniero aerodinámico, Adrian Newey, uno de los gurús de este deporte, considera que si los de Milton Keynes actúan de forma brillante, podrán volver a ganar pese a esta complicación añadida.
Red Bull, al ser el equipo campeón de 2022, ya disponía de menos tiempo que el resto dentro de la normativa del ‘hándicap aerodinámico’, que pretende igualar las cosas entre grandes y pequeños otorgándole más horas de simulación y túnel de viento a los peores equipos del año anterior. Red Bull disponía del 70% del tiempo, pero la sanción era del 10%, es decir, una penalización real del 7% de tiempo que le deja con un 63% para toda la temporada, lejos de Ferrari, que como segundo clasificado tendrá un 75% de tiempo disponible para estas importantes tareas.
“La reducción de las pruebas en el túnel de viento significa que podemos evaluar menos componentes diferentes, menos ideas diferentes”, dijo Newey en un video publicado por Red Bull. “Pero si somos realmente inteligentes y siempre ponemos las cosas correctas, entonces, por supuesto, no marcará mucha diferencia”.
No obstante, sí considera que sus rivales más cercanos, Ferrari y Mercedes, presentarán una mayor batalla que en 2022, curso en el que Red Bull ha arrasado por la superioridad de su coche en la segunda parte del año.
“Ferrari no descansará. Estarán resolviendo cuáles son sus áreas débiles. Tuvieron un par de problemas de fiabilidad y obviamente cometieron un par de errores en boxes. Así que volverán enseguida. Y obviamente, se vio a Mercedes empezando con un coche que estaba bastante lejos del ritmo y evolucionando hasta ganar la penúltima carrera. Así que sabemos que estarán justo allí. Así que va a ser un año difícil, seguro”, expresó Newey