LAS VEGAS, Nevada – Un niño de cuatro años murió tras ingerir fentanilo en el hotel The Orleans, informaron las autoridades de Las Vegas.
El incidente ocurrió el martes 12 de julio alrededor de las 3:00 a.m. en el vestíbulo del hotel, luego de que la madre, identificada como Amber Mitchell, y sus dos hijos (de 4 y 6 años) se registraran en el lugar el 8 de julio.
La mujer dejó a los menores en la habitación para bajar a jugar al póker y ganar dinero, según las autoridades.
Según se informó, Mitchell afirmó que tenía un amigo en la habitación el 11 de julio que llevó una bolsa grande de “píldoras azules con la letra ‘m’ y el número 30”.
Dijo además, según el relato policial, que colocó 10 pastillas que creía que eran OxyContin en el baño para tomarles una foto con la intención de venderlas. Se indicó que la mujer explicó que alrededor de la 1:00 a.m. regresó a la habitación del hotel para ver cómo estaban los niños, y cuando despertó a uno de ellos para ir al baño, parecía “realmente aturdido, como si todavía tuviera sueño y con las pupilas contraídas”.
Sin saber nada acerca del medicamento también conocido como “oxy”, dijeron las autoridades, la mujer buscó en Google qué sucedería si un niño lo ingiere y vio que su hijo no tenía ninguno de los síntomas. Pero el niño de cuatro años parecía actuar como si estuviera “borracho”, establece el informe de la policía.
Después, Mitchell volvió a jugar, salió a fumar hierba con unos amigos y regresó a la mesa de póker, según las autoridades.
También se informó que más tarde, cuando regresó a la habitación, la mujer notó que salía sangre de la boca del niño, por lo que lo llevó abajo en busca de ayuda. La seguridad del hotel y el departamento de bomberos comenzaron a brindar ayuda, pero declararon que el niño había muerto, según el relato oficial.
Después de completar las pruebas de narcóticos en las píldoras, los detectives encontraron un rastro positivo de fentanilo, se informó.
Durante una entrevista, según las autoridades, Mitchell mencionó que solo quedaban 10 pastillas en el mostrador, pero cuando regresó, solo vio nueve.
La policía dice que recuperaron nueve pastillas en la escena. Sin embargo, en la foto que la mujer habría tomado de las pastillas antes de dejar a los niños solos, se mostraban 15, según la policía.
Mitchell está acusada de abuso infantil, negligencia y posesión de una sustancia controlada con la intención de venderla.
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