El subsecretario de Salud llamó a no adoptar la idea de que las vacunas son inseguras, puesto que algunas reacciones adversas son comunes en las pruebas que se realizan en los ensayos clínicos.
Luego que se diera a conocer que murió un voluntario en una prueba clínica de la vacuna Covid-19 desarrollada por AstraZeneca en Brasil, el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, indicó que este tipo de eventos no son inusuales, pero llamó a que tener la idea de que las vacunas son inseguras.
“El punto clave es que esto ocurra no es inusual es esperable, lo que es importantísimo es son confundirlo con una señal de evidencia científica de que la vacuna pue ser adversa”.
En conferencia de prensa desde Palacio Nacional, López-Gatell Ramírez explicó que es normal que haya reacciones secundarias a las vacunas y los placebos que se apliquen durante los ensayos clínicos para averiguar la eficiencia de las distintas vacunas.
“Es común que las personas tengan eventos de enfermedad en su vida y si esto sucede cuando participan en un estudio, la clave es identificar si la frecuencia de presentar estos eventos es diferente o no en las personas que participan en los estudios comparado con cualquier otra persona que no participa. Si la frecuencia es semejante no hay razón directa para pensar que participar en el estudio incluyendo recibir los dos productos -vacuna o placebo- implica un mayor riesgo de presentar reacciones adversas, incluida la pérdida de la vida por cualquier causa”, detalló.
Reiteró que las reacciones seguirán ocurriendo en los ensayos clínicos de vacunas, de vacunas Covid-19 o de cualquier otro producto farmacéutico “y es importante no saltar a una conclusión errónea de que estos casos aislados significan una señal de que la vacuna pudiera ser insegura”.