Las expectativas ante la participación de Dani Pedrosa como piloto invitado en el GP de España del próximo fin de semana son enormes. Y es que a pesar de que diera por finalizada su carrera como piloto hace ya cinco años -2018-, todavía hoy el menudo piloto catalán cuenta con una legión de devotos seguidores. Seguidores que estos días han convertido en las redes sociales en trending tópicos la discusión de las opciones que pueda tener Pedrosa de hacer un buen resultado en Jerez.
Porque a pesar de llevar fuera de las carreras cuatro temporadas y volver en un momento en el que las diferencias entre los diez primeros de MotoGP se miden en décimas de segundo, nadie osa a vaticinar que Dani está fuera de poder optar a un buen resultado.
Los precedentes
Los precedentes de pilotos retirados que decidieron volver a enfundarse el mono hacen buena la frase de ‘segundas partes nunca fueron buenas’. El caso más reciente es el de Andrea Dovizioso, tres veces subcampeón del mundo de MotoGP, que después de anunciar su retirada finalizada la temporada 2020, ocho meses después aceptó una oferta para volver al Mundial. Un retorno que se tradujo en una tremenda decepción, que le llevó a retirarse definitivamente a mitad de 2022.
Pedrosa no ha perdido el hábito de pilotar una MotoGP; y tercero, Dani ha preparado a conciencia esta carrera rodando en Jerez mientras el campeonato estaba en América haciendo su gira por aquel continente
La experiencia de Sete Gibernau en este sentido no fue mucho mejor. Su primer ‘lo dejo’ tras terminar 2006 quedó anulado cuando decidió volver en 2009. Una vuelta frustrante a todos los niveles. También en su caso no acabó la temporada, retirándose por segunda vez a mitad de temporada. En 2019, diez años después de su primer ‘se acabó para mí’, Gibernau volvía a los GGPP para correr la Copa Moto E dentro del equipo de Sito Pons. Al final de la temporada, Sete se retiró por tercera vez, en lo que, de momento, parece la definitiva.
La situación de Pedrosa es diferente a la de Dovizioso o Gibernau en su día. Por un lado Dani vuelve en calidad de wild card, es decir, para hacer sólo la carrera de Jerez; segundo, como piloto de pruebas de KTM, Pedrosa no ha perdido el hábito de pilotar una MotoGP; y tercero, Dani ha preparado a conciencia esta carrera rodando en Jerez mientras el campeonato estaba en América haciendo su gira por aquel continente.
Y hay un cuarto factor que hace que apostar ‘contra’ Pedrosa sea cuanto menos un riesgo alto: su estadística en el circuito de Jerez.
Los números de Pedrosa en Jerez
21 veces ha corrido Dani Pedrosa en el circuito andaluz, 13 de ellas como piloto de MotoGP. Sus tres victorias allí en un primer momento parecen un bagaje normal tirando a flojo, pero cuando se calculan los porcentajes de podios -83%-, las poles -5- o las veces que ha salido desde la primera línea de la parrilla -también 83%-, la perspectiva cambia.
Es verdad que en su época las diferencias entre los pilotos se medían en segundos y medios segundos, y no en décimas como hoy en día. Es cierto también que Pedrosa ha perdido el hábito de compartir pista con otros pilotos, de verse rodeado de motos y competidores agresivos, pero la frase de ‘Dani es Dani’ adquiere especial profundidad cuando se la vincula al circuito de Jerez.
¿De qué será capaz Dani Pedrosa el próximo fin de semana? Me cuentan que en los últimos entrenamientos que hizo en Jerez fue rápido y me aseguran también que Pedrosa tiene claro que no quiere salir a ser comparsa. Pero una cosa es rodar sólo en un circuito, y otra hacerlo rodeado de pilotos con el nivel de intensidad que manda ahora en MotoGP. Por otro lado, como piloto de pruebas de KTM, la misión de Pedrosa es llegar a meta para generar para ingenieros la información que necesitan para seguir evolucionando las motos.
Terminar entre los 10 primeros sería un resultadazo; mejor que eso, un milagro. En cualquier caso, Pedrosa contará con el apoyo incondicional de un Jerez lleno hasta la bandera que le hará saber la admiración que siente por él… Estaría bien medir los decibelios del público al paso de Dani.
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