”Nos quedan once finales”


Diego López, portero del Espanyol hizo un análisis sobre la situación delicada del colista de LaLiga y aseguró “este parón” le ha venido “muy bien” al equipo para intentar lograr la permanencia. “Nos ha dado tiempo a valorar muchas cosas, a ver lo que ha pasado a nivel personal y colectivo. Quedan once finales, es un reto complicado, pero lo lucharemos hasta el final”, prometió.



El guardameta participó en una jornada telemática organizada por la Federación gallega y alertó del riesgo de lesión que tendrán los futbolistas cuando regrese la competición tras el parón por la crisis sanitaria del coronavirus.

“Es muy complicado poder retomar en un mes la competición. Habrá muchas lesiones, muchos problemas”, comentó, tras “estar dos meses con el trabajo en casa, en un jardín, meterte en un campo de fútbol conlleva muchos riesgos”. “Solo pediría que se vele por nuestra seguridad, por controlar el estado físico de cada jugador y, si se puede, volver a jugar”, declaró.

El Espanyol, uno de los más afectados por el coronavirus

El Espanyol ha sido uno de los afectados por el coronavirus, una enfermedad que, recordó, ha sido más grave de lo que se pensaba en un principio.

“Desgraciadamente hemos tenido varios casos de compañeros y gente del cuerpo técnico, muy preocupados. Al principio la información que nos llegaba era incierta y hemos visto lo duro que ha sido, dramático para mucha gente que por desgracia ha fallecido. Nuestros compañeros por suerte están bien y se están reintegrando al trabajo”, apuntó.

Diego López señaló que “debe primar” la integridad y salud de los jugadores y el resto de las personas que trabajan con ellos. “Se va a jugar sin público y los que vamos a estar al pie del cañón son futbolistas, entrenadores o fisios. Si se puede volver, pero con seguridad, hay que hacerlo”, precisó.


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