Una empleada de los Phoenix Suns renunció el pasado mes de mayo a su cargo después de quejarse sobre problemas de igualdad de género y malas conductas en el seno de la organización, unas quejas que la convirtieron en objeto de burla y represalia por parte de sus superiores.
Documentos obtenidos por la ESPN, que ya destapó en noviembre del año pasado el racismo, la misoginia y la cultura de trabajo tóxica extendida en la franquicia de Arizona, muestra el correo electrónico de resignación de Melissa Fender Panagiotakopoulous, miembro del equipo desde agosto de 2007. En su correo enviado el pasado 20 de mayo, enviado a 16 miembros del consejo de administración del grupo propietario de la franquicia, incluido el dueño mayoritario Robert Sarver, también propietario del RCD Mallorca, la extrabajadora pide a la dirección que trate de resolver los problemas de ambiente tóxico y cultura misógina que permean en la organización.
Entre la lista de conductas inadecuadas que cita la extrabajadora, destacan el conflicto de intereses a la hora de recibir comisiones y cerrar tratos comerciales, la falta de igualdad y la discriminación de género, la dejadez del equipo de recursos humanos y las actitudes abusivas y represalias recibidas después de denunciar sus preocupaciones a las personas encargadas de proporcionar soluciones y seguridad sobre estos temas.
Los Suns, a través de un comunicado, afirmaron que están revisando las acusaciones y que se mantienen consistentes con su política de respeto en el trabajo para crear un ambiente sano, seguro e inclusivo.