La derrota sufrida por el Covirán Granada este domingo en la pista del Cazoo Baskonia (105-81) es la novena seguida como visitante que sufre el conjunto andaluz, que está en la clasificación cada vez más cerca de los puestos de descenso.
El equipo dirigido por Pablo Pin, que se estrena esta campaña en la máxima categoría nacional, acumula cinco meses sin ganar a domicilio, ya que su último triunfo fuera se produjo a primeros de octubre en la pista del UCAM Murcia (82-89).
Desde entonces todos los desplazamientos de los rojinegros se han saldado con derrota al caer de forma consecutiva ante Gran Canaria, Unicaja, Barça, Casademont Zaragoza, Lenovo Tenerife, Joventut, Río Breogán y Surne Bilbao ante del traspié de este domingo en Vitoria.
Más grave aún que está pésima racha de resultados es que los granadinos han perdido todos estos partidos por una diferencia de más de quince puntos, lo que evidencia que ni ganan ni están cerca de hacerlo.
Estas derrotas, unidas a que como local sólo ha podido ganar uno de sus seis compromisos más recientes, hacen que el Covirán Granada haya perdido muchas posiciones en la clasificación tras un inicio de campeonato en el que estuvo instalado entre los primeros de la tabla.
El cuadro de Pin se encuentra ahora con dos triunfos de renta sobre el descenso, que marca un Baxi Manresa al que tendrá que visitar en las próximas semanas, aventajando en tres victorias al Carplus Fuenabrada, que se mantiene como colista.
El otro equipo que tiene por debajo en la clasificación es el Real Betis, al que también tendrán que rendir visita los granadinos en la segunda vuelta de la Liga Endesa.
El Covirán Granada regresa este lunes desde Vitoria y comenzará a preparar el martes el choque que le medirá como local el sábado en el Palacio de los Deportes al Gran Canaria