El Barça estaría dominando la fase regular de Euroliga con cierta solvencia de haber mantenido su habitual solidez en casa. Si la pasada temporada encajó sólo dos tropiezos en el Palau en toda la temporada, este año ya acumula cuatro. Entre ellos, los tres sufridos en los últimos cuatro partidos ‘europeos’ jugados en esta pista.
Con la intención de recuperar la confianza y fiabilidad en casa, los azulgrana reciben esta noche (20:30 horas) al Maccabi de Tel Aviv en el inicio de otra semana con doble jornada europea.
De esas dudas de los azulgrana en casa se han aprovechado ASVEL Villeurbanne (74-75), el Virtus Segafredo Bolonia (75-83) y el Anadolu Efes (75-80) recientemente. El Barça, además, se presenta a este partido después de caer en la pista del Madrid (91-86), lo que le hizo ceder el liderato en favor de los blancos y de Olympiacos que marchan con un triunfo más.
El Maccabi, luchando por entrar en playoff (es octavo con 11-10) llega mostrando mucha irregularidad a domicilio y con la baja de Lorenzo Brown, uno de los héroes del triunfo de España en el último Eurobasket, a causa de un esguince de tobillo. En el último precedente de choque entre ambos equipos, el Barça ganó en Tel Aviv por 79-86, el pasado 10 de noviembre.
El Barça recuperó algo de confianza con el triunfo del sábado en la pista del Bàsquet Girona (73-84) en la jornada de Liga Endesa. Además, Jasikevicius contará hoy con todos sus efectivos, a excepción de Sergi Martínez, ya que Cory Higgins vuelve a estar disponible tras perderse los dos últimos compromisos a causa de una lumbalgia.
Pese a la igualdad que preside la zona alta de la Euroliga este año, Jasikevicius sigue centrado en la mejora del juego. “¿Si miro la clasificación? No mucho, porque pierdes un partido y puedes caer cinco posiciones, pero ganas un par y subes otra vez”, dijo ayer en la previa. “Seguimos más preocupados, obsesionados, con mejorar el juego, pensando en cómo llegar en las mejores condiciones posibles a la Copa y la segunda parte de la temporada”.
Una pieza básica en los últimos partidos es Tomas Satoransky, recuperado ya de la tendinitis que le hizo perder cinco partidos este mes. El checo avisó de que ante Maccabi “será importante cómo empecemos y no dejarles jugar con libertad. Son muy buenos al contraataque y tienen individualidades diferenciales, como Baldwin”.