Las fuerzas del orden anunciaron el arresto del presunto cabecilla de una sofisticada red de robo de artículos de lujo de tiendas como Bloomingdale’s, Sephora y otros puntos de venta minoristas.
La banda, de 41 integrantes, revendía la mercancía robada en Amazon y eBay. El cabecilla, identificado como Roni Rubinov, incluso firmó un contrato de arrendamiento en 2019 en un almacén en el que planeaba abrir una especie de “grandes almacenes” de bienes robados, dijo el jueves la Oficina del Alcalde.
La procuradora general de Nueva York, Letitia James, y el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, revelaron la supuesta estafa en una conferencia de prensa en el Bajo Manhattan, donde describieron una “operación masiva de robo minorista” en la que un equipo se desplegó por toda la ciudad para robar mercancía de las tiendas. La acusación incluye cargos de posesión criminal de propiedad robada y lavado de dinero.
James y Adams dijeron que la policía incautó más de $3.8 millones en bienes robados de Rubinov, citando más de 550 tarjetas de regalo y efectivo.
“No se trataba solo de hurtos, sino de personas que entraban a las tiendas y limpiaban los estantes” como parte de una estafa organizada, dijo Adams. En una aparente referencia a las críticas al enjuiciamiento de los ladrones de tiendas, dijo que “esto era codicia” y que tomar medidas enérgicas contra ella no era “criminalizar la pobreza”.
Adams agregó que la redada demostró que “no tolerará el crimen callejero, el crimen minorista o el crimen organizado” en la Ciudad de Nueva York.
James, por su lado, prometió “restaurar un entorno en el que los neoyorquinos se sientan seguros y protegidos”. También se comprometió a proteger los negocios de la ciudad y preservar el estado de derecho.
La investigación fue impulsada en parte por la comunidad empresarial. Kathryn Wylde, directora ejecutiva de Partnership for New York City, planteó el tema a los funcionarios varias veces el año pasado, dijo James. Los investigadores del Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York también trabajaron con equipos de seguridad de Macy’s, Rite Aid, CVS Pharmacy y Lowe’s. Los bienes robados incluían cosméticos y otros artículos de farmacia.
Ese tipo de colaboración es común en la ciudad, y algunos minoristas incluso pagan a los oficiales de Policía de Nueva York para que trabajen en sus tiendas en turnos fuera de servicio. En el año fiscal 2021, los minoristas gastaron alrededor de $32 millones en esos turnos, un aumento del 70 % con respecto a los cuatro años anteriores, según las cifras del presupuesto de la ciudad.
Los minoristas han estado haciendo sonar la alarma sobre el robo organizado y los robos a gran escala, pero no está claro qué tan frecuentes son. El robo representa un promedio del 0,07% de las ventas al año, según la Federación Nacional de Minoristas. En California, el gobernador Gavin Newsom prometió más $250 millones para ayudar a combatir el robo minorista, y la oficina del fiscal general del estado está lista para crear una unidad dedicada a ello.
El año pasado, la Ciudad de Nueva York reportó su tercer total más bajo de hurto mayor (robo de más de $1,000) en una década, aunque las cifras del Departamento de Policía para el crimen incluyen robos más allá de los minoristas. Aún así, tales incidentes han aumentado un 52% en lo que va del año.
El estado ha recategorizado recientemente el robo de propiedad como un delito más grave. En abril se revisó una ley de 2019 que eliminó la fianza en efectivo y ordenó la liberación de las personas arrestadas por la mayoría de los delitos menores y delitos graves no violentos mientras esperaban su cita en la corte, luego de que los críticos culparan al cambio por un aumento en el crimen, a pesar de la falta de evidencia.
Según la ley original, un juez no podía retener a un acusado bajo fianza en efectivo por hurto. Con la revisión, los jueces pueden fijar la fianza en algunos casos.