El Hereda San Pablo Burgos recibe este sábado a Fuenlabrada en la última jornada de liga, en la que debe ganar y esperar a la derrota de algunos de sus rivales directos (Andorra y Zaragoza) para permanecer, una temporada más, en la Liga ACB, la máxima categoría del baloncesto español.
“Estamos seguros de que vamos a conseguir la parte que nos toca a hacer a nosotros”, ha afirmado este viernes el entrenador de los burgaleses, Paco Olmos, “con la seguridad y responsabilidad” de dejar a Burgos en la ACB, por lo que este choque “es el más importante de la historia del club”.
San Pablo Burgos tendrá a todos sus efectivos disponibles, con la salvedad de Dani Díez, que seguirá siendo baja por su esguince de tobillo.
Con esa misma necesidad de victoria llega a este partido Fuenlabrada, decimoquinto clasificado y tras ganar la jornada anterior a Río Breogán.
Sus opciones de permanencia pasan por ganar su partido en Burgos y, en caso contrario, esperar la derrota tanto de Zaragoza como de Andorra.
El entrenador de los burgaleses espera que el de mañana sea un partido “duro y de contacto”, en el que la lucha por los aros “va a ser fundamental” para no conceder segundas opciones al rival.
“Si todo eso lo conseguimos defensivamente, en ataque intentaremos tener un control de juego” además de mantener la concentración y la energía”, ha remachado.
Paco Olmos quiere que la afición anime desde el calentamiento y que “la atmósfera ayude porque mañana juega todo Burgos y todo Burgos tiene que estar desde temprano en el Coliseum”.