UVALDE, Texas – Gritos de reclamo predominaron durante una reunión especial de la Mesa Directiva del Distrito Escolar Independiente Consolidado Uvalde, pues los residentes de la comunidad exigieron mayor seguridad para el nuevo ciclo escolar.
Y es que ellos se han mostrado frustrados con las medidas que se han tomado después del tiroteo masivo en la Escuela Primaria Robb, que dejó a 19 alumnos y dos maestras muertos el 24 de mayo.
“Debería darles vergüenza”, les gritaron los asistentes a la reunión al superintendente Hal Harrell y a Luis Fernández, uno de los miembros de la Mesa Directiva.
La reunión especial se llevó a cabo la tarde de este lunes, un día después de que un comité especial legislativo diera a conocer un informe de 80 páginas en el que se detallaron las “múltiples fallas sistemáticas” que prolongaron la respuesta policial el día de la balacera. Una serie de videos revelados en los últimos días mostraron cómo los oficiales esperaron 77 minutos antes de abatir al autor de la masacre, aún cuando se escuchaban disparos dentro de un salón de clases y mientras varios niños llamaban al 9-1-1 para pedir auxilio.
En la reunión de más de tres horas, los padres y menores exigieron conocer qué está haciendo el distrito escolar para mejor proteger a los estudiantes a partir del nuevo ciclo educativo.
“¿Qué van a hacer para asegurarse de que yo no tenga que esperar 77 minutos, desangrándome en el piso de mi salón de clases como lo hizo mi hermana?”, preguntó Jazmin Cazares, hermana de la pequeña Jackie, quien murió en la balacera escolar.
Los familiares lamentan que no les hayan enseñado el video primero a ellos antes de publicarlo en la prensa. Brett Cross, padre de una de las víctimas, Uziyah García de 10 años, dice que el video iba a ser mostrado a las familias antes que al público general este fin de semana.
En días anteriores, el superintendente Harrell anunció que el distrito escolar estaría colocando nuevas vallas en los perímetros de sus escuelas, añadiendo más cámaras de seguridad, contratando más policías escolares, y cambiando las puertas y cerrojos en sus instalaciones.
La investigación sobre la balacera arrojó que el atacante armado saltó una cerca para entrar al estacionamiento de la escuela, luego ingresó a uno de los edificios por una puerta que no estaba cerrada con seguro, y después entró a un salón de clases donde el cerrojo de la puerta no estaba funcionando adecuadamente.
“No quiero ir a la escuela si no tienen protección”, dijo una estudiante de la Escuela Primaria Robb a la Mesa Directiva en la reunión.
El ciclo escolar 2022-2023 en Uvalde CISD está programado para iniciar este 15 de agosto, aunque el superintendente Harrell dijo que buscará posponerlo para dar tiempo a implementar las nuevas medidas de seguridad en las escuelas.
Los padres también exigieron que Pete Arredondo, el jefe de la policía escolar y comandante al mando del operativo el día de la masacre, sea destituido. Él se encuentra bajo licencia administrativa desde este 22 de junio.
Ante estos reclamos, el superintendente Harrell dijo que evaluarán el estatus de Arredondo en base al informe que dio a conocer el comité estatal investigativo.
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