El nombre de Radomir Antic para los aficionados del Atlético de Madrid siempre irá vinculado al de Milinko Pantic. Un futbolista que llegó en su día al club colchonero por petición expresa del técnico y se acabó convirtiendo en una auténtica estrella. Su relación iba más allá como reconoció Dusan Antic en la Cadena SER: “Para mi padre Milinko no era un futbolista, sino que era como un hijo más. En casa cualquier celebración siempre venía”.
Sin duda alguna, ‘Sole’ ha sido una de las personas más afectadas por el fallecimiento de Radomir. “A mí me faltan palabras para poder describir como era el míster y lo que ha hecho por mí. Gracias a él yo estoy aquí con toda mi familia, era un persona muy diferente. En todo, no sólo te hablo de fútbol. Era muy inteligente. Un grandísimo entrenador. Fue un grandísimo padre, un grandísimo abuelo… La casa de Radomir Antic estaba abierta para todo el mundo. Era un tipo muy alegre, contagiaba con su alegría”, a lo que añadió que era “una persona que no ha tenido enemigos. Yo iba con él muchas veces, y se paraba a hablar con todo el mundo. Era tan amable. El míster nunca decía que no podía. Se podía aprender mucho de él no sólo en fútbol sino de la vida”.
La relación entre Milinko y Radomir viene de lejos. “Nos conocimos en 1985 cuando estábamos en el Partizan. Él trabajaba allí como ojeador y encargado de mirar la categoría mía que era como una Segunda B. Después trabajamos juntos y forjamos una buena amistad de… muchos años ya he perdido la cuenta. Somos muy viejos…”, acabó bromeando.
El que fuera ’10’ del Atlético recordó el instante de su fichaje por el Atlético. “No fue una decisión fácil, porque yo estaba muy contento en Grecia. Era un Dios. Es cierto que yo estaba en un equipo pequeño pero yo allí hacia de todo. Fue un reto cuando me llamó Radomir. Tenía ganas de trabajar con él, y por fin lo hicimos en el Atlético de Madrid. Llegue un poco tarde, hubiese rendido más con tres o cuatro años menos pero se hizo lo que se pudo. El mister tenía muy claro lo que necesitaba el equipo. Arriba teníamos dos puntas como Kiko y Penev que necesitaban balones. Mi trabajo era ese que los delanteros funcionasen”.
Ya le quiso fichar..
Lo cierto es que Radomir llevaba tiempo intentando contratar a Pantic para sus equipos pero nunca se llegó a dar el fichaje. “Ya intentó ficharme cuando estaba de entrenador en el Real Zaragoza pero no pudo ser porque en aquel entonces no se podía salir de Yugoslavia antes de cumplir 28 años”, confesó.
Y es que no ha sido un momento nada fácil para Sole. “Me falta de todo del míster. Nosotros éramos muy cercanos. Yo he estado muchos días en el hospital hasta que le volvieron a meter en la UCI. Estaba convencido que se iba a salvar. Era muy competitivo, era muy deportista, le gustaba tanto la vida. Es una pena porque nos ha dejado muy pronto. Era una persona de 71 años”, concluyó.
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