Con Simone como directora ejecutiva, la empresa Biles & Co. presentó este martes en Bercy su mejor cuenta de resultados posible: oro olímpico por equipos, en una competición para la historia también por los ganadores de la plata y el bronce, Italia, inédita desde 1928, y Brasil, que firmó su primer podio.
BACK ON TOP! 🥇
The U.S. Women are Olympic Champions!
Congratulations to Simone, Jordan, Jade, Sunisa & Hezly – through it all, you did it TOGETHER. pic.twitter.com/fB60kru7lp
— USA Gymnastics (@USAGym) July 30, 2024
El rendimiento impecable de un grupo de trabajadoras con un talento sideral permitió a Estados Unidos llevarse la victoria en el Estadio Bercy de París con 171,296 puntos y una ventaja de 5,802 sobre el equipo transalpino (165, 494), que en cuatro meses ha ganado el oro europeo y la plata olímpica.
Las brasileñas (164,497) debutaron como medallistas de equipo impulsadas por Rebeca Andrade, que amenaza con hacer sufrir a Biles en la final individual.
Gran Bretaña, Canada, China -que se hundió en las dos últimas rotaciones-, Rumanía y Japón completaron la clasificación por ese orden.
Simone Biles, Sunisa Lee, Jade Carey, Jordan Chiles y Hezly Rivera son la nueva alineación campeona. Junto a Biles, indiscutible, inigualable, en la final tuvo papel crucial Jordan Chiles, que también hizo los cuatro aparatos. Quizá borró así la pena de haber quedado fuera de la final individual pese a ser cuarta en la ronda clasificatoria: Biles y Lee terminaron primera y tercera y solo puede haber dos finalistas del mismo país.
La rotación estadounidense de salto fue formidable, con sus tres gimnastas por encima de 14,400 y Biles en 14,900. Aparcó el Biles II hasta la competición individual, pero saco el máximo rendimiento de su Cheng: rondada, medio giro antes de tocar la tabla y mortal planchado con giro y medio. El segundo más difícil del código.
Tras solo un aparato, su equipo ya sacaba casi punto y medio a China, que empezó en asimétricas, con Yihan Zhang y sus 14,433 como punta de lanza.
Italia, Canadá y Brasil siguieron a continuación. Rebeca Andrade resolvió sus problemas de la ronda previa en las barras con un 14,533 que alimentó sus esperanzas de cara a la final individual del jueves.
Pero Biles, que también pasó después por las asimétricas, demostró que incluso en su peor aparato es un genio y con total limpieza en sus vuelos obtuvo un 14,400.
Las italianas, aun con el brillo de su reciente título europeo, se mantuvieron por delante de China. Alice D’Amato hizo las mejores barras, 14,633, mientras en la viga de equilibrio Qiu Qiyuan voló sin errores y mereció un 14,600.
A mitad de competición Estados Unidos tenía un colchón de 3,103 sobre Italia y de 3,966 sobre China. Las brasileñas eran sextas a 6,267.
Con las norteamericanas y las italianas en la barra y las chinas y las brasileñas en el suelo, Estados Unidos mantuvo un margen de 3,602 sobre Italia tras la tercera rotación, pero la clasificación dio un vuelco en las siguientes posiciones. Británicas y canadienses, que brillaron en el salto, adelantaron a las chinas, que fallaron en el suelo.
Manila Esposito, campeona europea de la especialidad y absoluta a los 17 años, sacó un 13,966 que pareció poca cosa comparado con el 14,366 de Biles y el 14,600 de Sunisa Lee.
El suelo no podía quitar el oro a Estados Unidos ni la plata a Italia. Y si algún aparato podía dar el bronce a Brasil era el salto, el único en el que Andrade ha batido a Biles. ‘GOAT’ cerró la jornada con su ejercicio supremo sobre el tapiz de Bercy. Un oro cantado, pero ganado sin dejar nada al azar. Biles & Co. volvieron a bañarse en oro, merecidamente, y el podio entero fue una fiesta. Del primer al tercer escalón.
(Con información de EFE)