James Rodríguez sueña con jugar en el
Atlético de Madrid. El futbolista colombiano quiere resolver su complicada situación en el Real Madrid y ponerse la camiseta rojiblanca sin tener que abandonar la capital de España, donde está asentado. Tras su experiencia en Alemania, el regreso a nuestro país fue tal y como se preveía en vista de que el cafetero sabía que no era una de las primeras opciones de Zidane. El resultado, poca presencia, pocos minutos y escasas oportunidades.
El cafetero no desea vivir otra temporada más así y durante el pasado verano ya sonó con fuerza para el Atlético. Era una petición de Diego Simeone, que vio en él ese futbolista diferente que marcase la diferencia en la última parte del campo. La operación no se dio porque el Real Madrid se negó finalmente a reforzar a un rival directo. Como quiera que su situación no ha mejorado, el colombiano se ha ofrecido en varias ocasiones al cuadro rojiblanco para la temporada que viene.
Un fichaje que parece poco menos que imposible, habida cuenta de la situación del mercado y del hecho de que el cuadro blanco no querrá reforzar de nuevo al Atlético y verse con un nuevo caso Marcos
Llorente.
Sea como fuere, el futuro del futbolista es debate nacional en Colombia y muchos querrían verle de rojiblanco. Si hay una voz autorizada para hablar del asunto es la de Luis Amaranto Perea, una de las leyendas del Atlético de Madrid, ahora segundo entrenador de Junior, y compatriota del madridista.
Perea quiso advertir a James de lo que implicaría llegar al equipo colchonero en términos de juego para él, porque es un futbolista que no está tan habituado a tener que trabajar en defensa como se hace en el Atlético. Con todo, lo vería un gran fichaje.
“Cuando se es buen jugador, te costará más una liga que otra, por sus características. Pero cuando eres buen jugador, lo normal es que si te adaptas, rindas. Creo que James tiene que ir donde se sienta feliz, ya lleva tiempo siendo discontinuo en sus apariciones y rendimiento y esto lo perjudica”, comenzó diciendo al programa ‘Conexión’ de Win Sports.
“Que se marche a una liga u otra, no depende tanto de que la liga sea mejor o peor, sino que él sea capaz de adaptarse y entender que necesita más continuidad para que su fútbol, que no ha perdido, vuelva a aparecer.Pasa más porque él encuentre ese fútbol donde, a través de la exigencia, vuelva a tener continuidad”, añadió en este sentido.
MÁS EXIGIDO
“Simeone es un entrenador que basa su juego desde la seguridad defensiva, todo el que estuvo en Atlético de Madrid lo hemos visto, tiene que adaptarse a lo que quiere Simeone. Mucho sacrificio en el juego, casi que renunciar al ‘yo’, por el ‘nosotros’. James debe tener muy claro, si opta por ir al Atlético, lo que se va a encontrar. A partir de ahí volvemos a lo mismo, es más una situación de adaptación que de comodidad”, le advirtió el exjugador colchonero a su compatriota.
“Por las características, puede que no sea el fútbol o el equipo que más le conviene a James, pero también puede ser que James necesite un fútbol como este para adaptarse a esa necesidad que hay a la hora de defender. Él sabe las diferencias que hay entre Real Madrid, Bayern München y Atlético de Madrid. Son muy marcadas. A partir de allí, todo pasa por la adaptación que pueda tener James, en este caso en Atlético de Madrid, o cualquier club al que quiera ir”, aseveró.
En este sentido, señaló que en el fútbol moderno cada vez se da menos la figura del jugador que se desentiende de trabajar en defensa. “Entiendo que ‘la figura del 10’ ha generado muchísima controversia. Pero personalmente pienso que ningún jugador, más allá del talento que tenga, por defender no va a perder talento. Va a ser un jugador más completo. Hoy la dinámica del futbol va más en estos jugadores que tienen que participar en las dos fases. Cuando hay que atacar, hacen parte del ataque, cuando hay que defender, también tienen que trabajar en defensa. Al final los entrenadores trabajan de forma muy parecida y esas intensidades y exigencias del fútbol son las que faltan en nuestro medio”, sentenció.
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