¿Pero esto qué es?

Si nos tomamos la molestia de ver desglosados nuestros resultados contra los de abajo, lo calificaremos de desolador. Imposible aspirar a nada con ese rendimiento y falta de predisposición contra rivales a los que hay que competir queriendo ganar, no con desidia.

Claro que ellos se juegan algo y nosotros no. Entre lo regalado y lo no competido, nosotros mismos nos hemos puesto en la tesitura de no jugarnos nada. Ganado a pulso este fin de temporada sin metas. Porque no nos las merecemos, no porque no hayan estado a nuestro alcance.

No es comprable que nos han distraído las finales; hace tiempo que quedaron atrás. Competir contra los Valladolid, Alavés y Huesca de turno no permite excusas del tipo cansancio o bajas. Quienes jueguen deben dar otra imagen; a su nivel en lo futbolístico, al máximo en competitividad, brega y ganas de ganar. Se saca otra conclusión de los últimos minutos en El Alcoraz.

Chuts al último anfiteatro, balones regalados en banda, nula ambición por acabar el partido mordiendo y en área contraria ante un rival que pide la hora y con congoja en el cuerpo. Lo siento mucho, pero no es admisible ninguna excusa.

Marcelino parece tener ya diagnóstico. Ahora, mano firme al aplicar la medicina. Corremos el riesgo de que el desenganche entre afición y equipo aumente. Dicho desencanto será palpable en San Mamés; todo indica que podremos asistir la próxima temporada.

Plantilla 2021-2022

Se requieren cambios sustanciales en la plantilla de la próxima temporada. Marcelino lanza mensajes en esa dirección en cuanto puede. No trabaja cómodo con tanto efectivo. Es cometido del Director Deportivo.

Desde ya sabe qué jugadores con contrato para la próxima temporada necesitan otro destino con el protagonismo y minutos que aquí no tendrán. La ubicación del filial la próxima temporada determinará quiénes suben, se mantienen o causan baja. Sería inexplicable llegar a agosto sin resolver cuestiones que están ya sobre la mesa.

Tras ello, ver posibles refuerzos que ayuden a colarse en Europa y económicamente contar con ese aporte adicional.

Los anteriores gestores del Athletic decidieron hace tiempo que sus jugadores clave sólo saldrían vía ejecución de cláusula. No nos debilitaríamos deportivamente por intereses económicos o de avales. Suscribo dicha política y no entrar en ese Moneyball tan en boga en el fútbol de hoy. Mi amigo
Kroma
, tipo con olfato, se calienta y teme algo que detecta en las últimas semanas.

En su opinión, los medios cercanos a la Directiva están abonando el terreno sugiriendo a oyente y lector la conveniencia de hipotéticas ventas de jugadores, incluso de peso y poso, por razones económicas, en línea con el interés de nuestros gestores. Ciertamente, escuchando y leyendo a algunos se ve una labor de zapa en dicha línea.

Para crecer debemos empezar por mantener lo bueno que tenemos. Ciertas ventas ya generaron crispación en su día. Mucho ojo. El bien del Club está por encima de los avales. Gestionar en base a éstos no sería bien visto.

Deseo que Kroma se equivoque. No puede ser… ¿O sí?

Si nada se tuerce, aquí en siete días.


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