“Puede que Pessina se quede en la plantilla. Por sus características, no es el centrocampista adecuado para nosotros, pero es un excelente jugador. Y como nos hemos quedado sin plazas para fichar a extranjeros, él puede quedarse”, dijo Gasperini, técnico de la Atalanta, poco antes de que cerrase el mercado de fichajes del pasado verano. Pessina acababa de volver de una fructuosa cesión al Hellas Verona, y dicho conjunto quería seguir contando con él una temporada más, pero Gasperini, más como remiendo que como deseo expreso, decidió quedarse con él.
Como bien dijo el bueno de Gian Piero, por sus características Matteo Pessina no venía a ser el centrocampista que mejor casa con el fútbol vertical y vertiginoso que practica su Atalanta, pero el chico (tiene 23 años) ha sabido reinventarse a sí mismo, o cuanto menos remodelarse, para hacerse con un hueco en el ‘once’.
En lo que va de curso (y arrancó el mismo lastrado por una lesión de rodilla), Pessina ha participado en un total de 24 partidos entre Champions, Serie A y Coppa, logrando 3 goles. No es esa la faceta en la que más destaca, porque a pesar de que de inicio acostumbra a partir como el escalón por delante del doble pivote formado por Freuler y De Roon, es más de dar el último pase que de buscar la portería contraria con el chut.
Su buen hacer le ha valido para debutar con la absoluta de Italia el pasado mes de noviembre y todo apunta a que este miércoles ante el Real Madrid formará en el ‘once’ titular de Gasperini. Pessina era una pieza que no encajaba en el puzzle de esta Atalanta, pero se empeñó en hacerlo y lo consiguió.
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