Ser un youtuber de éxito puede acarrear también graves consecuencias. Es importante ser consciente de la influencia que se ejerce sobre los propios seguidores, un gran poder que conlleva una enorme responsabilidad. Algo que al parecer pasaron por alto los encargados del canal DaddyOFive. Sus bromas pesadas divierten cada día a más de 700.000 suscriptores, una popularidad que ahora se ha transformado en su peor pesadilla.
Las bromas pesadas son la temática principal de su canal de Youtube.
¿La razón? El objeto de estas burlas son un grupo de niños de entre 10 y 17 años. Sus progenitores, Mike y Heather Martin, acaban de perder la custodia de sus retoños tras exponerlos a una humillación pública y constante, solo con el propósito de aumentar las visualizaciones. Lágrimas, autolesiones, peleas, sustos… Y las risas de los padres como telón de fondo. Durante uno de los vídeos, llegamos a escuchar auténticas barbaridades como esta: “Pégale, ella no es una mujer, es tu hermana y eso no cuenta”. Increíble, ¿verdad?
Los hijos del matrimonio son los auténticos protagonistas del canal.
Youtube, un arma de doble filo
La pareja ya ha eliminado todas las publicaciones del canal, a excepción de una. Una disculpa pública y sincera, que ofrece además la explicación del escándalo en el que se han visto envueltos. “Nos hemos dado cuenta que hemos cometido errores que han causado cierto dolor a nuestra familia (…) Nuestros hijos están a salvo y felices, son niños normales”, asegura el matrimonio Martin durante el vídeo.
https://www.youtube.com/watch?v=WoYTdYRPPpw
La encarga de sacar a la luz estas vejaciones ha sido Rose Hall, la madre biológica de dos de los niños protagonistas del canal. Esta ya denunció hace unos meses lo ocurrido, aunque la acusación fue remitida por causas ajenas a su voluntad. La ayuda de otras grandes figuras del universo Youtube ha sido clave para dar a conocer las imágenes. Juntos critican de manera vehemente el maltrato físico y psicológico de los niños en este tipo de plataformas, tan expuestas al mundo.
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