Chiapas. La disputa por el control político del municipio de Teopisca, ubicado a 20 kilómetros de San Cristóbal de Las Casas, detonó este martes.
Los vecinos están inconformes porque el Tribunal Electoral del Poder Judicial del Estado resolvió convocar a elecciones para sustituir al alcalde asesinado el pasado 8 de junio, en manos de personas armadas. Dos grupos se han confrontado para obtener el control político de este lugar que es estratégico por ser una de las principales zonas de paso del Petén guatemalteco con México.
Tras el asesinato, durante varios días pobladores bloquearon la carretera en varios puntos de la región, entre ellos la carretera que comunica con la capital de Chiapas, para exigir que sea la exsíndica municipal, Josefa María Sánchez Pérez, quien asuma el cargo de alcaldesa.
Este día pobladores volvieron a bloquear las dos entradas de San Cristóbal de La Casas; uno de estos bloqueos fue en el crucero de Rancho Nuevo, junto al cuartel de la 31 Zona militar de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Durante los desalojos, algunos de los pobladores que se manifestaban usaron armas de fuego para arremeter contra el helicóptero de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC). Grabaron un video donde se escucha la voz de una persona que grita “¡Tíralo, tíralo, tíralo!”.
También retuvieron a tres soldados, seis trabajadores de Protección Civil y tres personas del servicio de limpia del Ayuntamiento de San Cristóbal, estos son Daniel Iván López Trujillo, Jorge Alejandro Espinoza Méndez, Ramiro López Urbina, Daniel Humberto Cortouis Castillo, Jesús López Gómez y Eduardo Martin Velasco Bermúdez.
En videos grabados por los mismos manifestantes, se observa que los tres militares fueron llevados a la comunidad de Betania, municipio de Teopisca. En las imágenes se ve cuando los uniformados son golpeados y les dicen que van a ser liberados y entregados, porque su demanda -le grita uno- no tienen que ver con las fuerzas armadas, sino con el gobierno estatal.
Extraoficialmente se informó que los tres militares fueron liberados, pero no se sabe si lo mismo sucedió con los seis empleados de Protección Civil y tres trabajadores del servicio de limpia que transitaban por la zona.
Por su parte, la Fiscalía de Justicia informó que durante el desalojo detuvo a siete personas a quienes acusa de los delitos de motín, daños, ataques a las vías generales de comunicación y atentados contra la paz y la integridad corporal y patrimonial de la colectividad del Estado.
También informó que en el operativo fueron asegurados ocho vehículos (seis automóviles y dos motocicletas), así como un arma de fuego calibre 22 mm, 22 cartuchos percutidos calibre 2.23 mm y 17 del calibre 9 mm.
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