El Espanyol que milite en Segunda División y luche para que la estadía en el infierno solo dure un año, poco tendrá que ver con el equipo que consumó el descenso hace pocas semanas.
Pese a que Luis García avisó en la última rueda de prensa previa al partido de Liga, que no querían que se diera “un mercadillo” y que los jugadores no serían vendidos a precio de saldo tras el descenso, lo cierto es que salvo sorpresa, la diáspora puede ser importante.
De los 24 jugadores que conformaban la plantilla del Espanyol el pasado curso, podrían irse este verano una docena. La diáspora, provocada por el descenso, viene dada por los cedidos que no siguen de blanquiazul (siete) y la muy probable marcha de varios pesos pesados del vestuario, llámense Joselu o César Montes.
Del pelotón de jugadores que estaban a préstamo el pasado ejercicio, no se quedará ninguno. Son cinco que estaban cedidos: Denis Suárez, el portero Álvaro, Vini Souza, Pierre-Gabriel y Dani Gómez. Volviendo todos a sus respectivos equipos de origen menos Denis, que llegó gratis al Espanyol del Celta y ya tiene un preacuerdo para fichar por el Villarreal.
Además, hay también dos bajas confirmadas, Adrià Pedrosa y Aleix Vidal. El canterano se convierte en una de las ausencias más sonadas aunque ya hace varios meses que se confirmó que no renovaría y que su destino estaba en Sevilla. Mientras que el propio Aleix ya dijo que no seguiría en el Espanyol, siendo quizás un club extranjero su próxima aventura.
A estas siete bajas confirmadas, se deberán unir varios jugadores de peso que podrían abandonar Barcelona, futbolistas clave en los onces tanto de Diego Martínez, como de Luis García. Joselu tiene pie y medio en el Real Madrid, siendo la fórmula en cómo volverá a la Casa Blanca la única incógnita: en forma de cesión (tiene una cláusula en su contrato que le permite salir cedido sin coste alguno si presenta una oferta de un club que se haga cargo del 100% de su ficha en los diez primeros días de mercado) o traspasado, la vía que seduce al club catalán.
Siguiendo con los pesos pesados que pueden ‘volar’, a César Montes no le faltan ‘novias’ y se antoja muy complicado que siga de perico en Segunda. Lo mismo que Braithwaite, que ya ha dejado caer en su estadía con su selección que podría cambiar de aires. El ‘Lele’ Cabrera también está oyendo cantos de sirena interesantes y el Olympiakos, sin ir más lejos, podría presentar una oferta por el uruguayo, pues Antonio Cordón lo quiere en el Pireo.
Por último, pero el más importante, Sergi Darder, el asunto que más preocupa al espanyolismo. El capitán se está tomando unos días de reflexión para saber qué hacer con su futuro. El Mallorca, el Atlético de Madrid y algún ‘tapado’ están al acecho…
Tampoco se puede olvidar que jugadores como Nico Melamed (Luis García dijo que seguiría el próximo curso), Pol Lozano, Rubén Sánchez o Koleosho acaban contrato en 2024, por lo que el club debe mover fichar u optar por buscar una venta este verano.
Siete bajas seguras y muchos jugadores con el futuro en el aire, casi una docena que pueden irse este verano. El Espanyol 2023-24 poco tendrá que ver con el del pasado curso, aunque Luis García sigue cruzando dedos para que el vestuario “no sea un mercadillo”. Deseo complicado de consumar aunque queda mucho tiempo por delante y todo puede dar muchas vueltas todavía.