El bullicioso interior de Golden State y alma competitiva del equipo le dio un guantazo a Brandon Clarke bajo el aro que fue castigado como flagrante 2 por los colegiados
Draymond Green se volvió loco cuando vio que los árbitros no temblaban a la hora de expulsarle por un guantazo en la cara a Brandon Clarke seguido de un tirón de camiseta bajo el aro que terminó con el jugadores de los Memphis Grizzlies tumbado encima del parquet. Los colegiados revisaron un buen rato la jugada y decidieron sancionar con una falta flagrante de tipo 2 para el bullicioso interior y líder emocional de los Golden State Warriors.
“Es una p*** locura”, comentó Stephen Curry con los árbitros tras conocer la decisión. Green había dado un par de vueltas solo por la cancha, dando brincos de enfado y buscando la rabia de la grada de Memphis, que se encendió con la expulsión del jugador.
Los árbitros interpretaron que el manotazo fue innecesario y excesivo, un elemento clave para provocar la expulsión directa del jugador. Steve Kerr también hizo aspavientos desde la banda, y es que Golden State tuvo que jugar sin su distribuidor del juego durante el tramo final del segundo cuarto y toda la segunda mitad.
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